Theo Hernando: «Si se reduce la PAC, muchos agricultores canarios tirarán la toalla»

Asaga en Bruselas | Foto: ASAGA

Asaga en Bruselas | Foto: ASAGA

➤ «El fondo de modernización agrícola pasaría a ser un cajón desastre que cada país gestionaría a su antojo» ➤ «España ya incumple con el POSEI adicional; si le dan más margen, esto será un disparate» ➤ «Nos jugamos el relevo generacional y la autosuficiencia alimentaria de Canarias»

La organización agraria ASAGA Canarias-ASAJA ha estado presente en la reciente concentración celebrada en Bruselas contra la propuesta de reforma del marco financiero plurianual de la Unión Europea. En declaraciones a El Espejo Canario, su secretario general, Theo Hernando, advierte de que lo que está en juego es el futuro de la agricultura y la ganadería en el Archipiélago. «Si se aprueba esta propuesta, la PAC dejará de existir como la conocemos, y eso para Canarias sería una estocada casi definitiva», afirma.

Una propuesta que rompe el principio de solidaridad europea

La Comisión Europea plantea sustituir la Política Agraria Común (PAC) por un fondo multisectorial sin partidas específicas, gestionado bilateralmente entre Bruselas y los Estados miembros. Esto supondría, según Hernando, el final de una política que desde la posguerra ha sido «una herramienta de cohesión y equilibrio entre territorios».

«La propuesta es tan de máximos que ha alarmado a todo el sector primario europeo», dice. El nuevo fondo, denominado de Cohesión y Desarrollo, permitiría a los países decidir a qué destinan el dinero, lo que en el caso español «es garantía de que esos fondos no acabarán en el campo».

El mayor riesgo está en que este nuevo sistema eliminaría la garantía presupuestaria para sectores clave. «El segundo pilar de la PAC, que incluye ayudas a jóvenes agricultores, regadíos y modernización, desaparecería como tal», advierte.

Canarias, especialmente vulnerable

Hernando recuerda que la agricultura y ganadería canarias ya se mantienen en equilibrio muy precario. «Las producciones sobreviven porque hay ayudas. Si esas ayudas se recortan o se diluyen en fondos sin destino concreto, los productores abandonarán», afirma.

En Canarias, esas ayudas llegan principalmente a través del POSEI y del actual Plan Estratégico de la PAC (PEPAC). Pero el POSEI adicional del Estado español —21 millones anuales más un 20% negociado— ya se está incumpliendo, lo que enciende todas las alarmas. «Si ya incumplen lo obligatorio, imagina si les dan margen para decidir en qué gastarlo. Esto será un disparate», lamenta.

ASAGA Canarias y el Gobierno de Canarias han defendido en Bruselas la necesidad de actualizar la ficha financiera del POSEI, congelada desde hace 20 años mientras los costes de producción se han disparado.

Riesgos: abandono, dependencia alimentaria y pérdida de identidad

De prosperar la reforma, las consecuencias para Canarias serían devastadoras. Hernando es tajante: «Sin ayudas, muchos agricultores y ganaderos tirarán la toalla. Tendremos una región de bancales secos, de cemento, sin relevo generacional y dependiendo del exterior para alimentarnos».

Además, alerta de la competencia desleal que suponen las importaciones de terceros países: «Europa abre acuerdos comerciales con países que no cumplen con ninguna norma fitosanitaria, medioambiental ni laboral. Y aún así se les favorece». Como ejemplo simbólico, menciona que «el fondo de la PAC se quiere recortar en 86.000 millones y dejarlo en 300.000, justo la misma cifra que se quiere destinar a ayuda exterior y a Ucrania, que ni siquiera es miembro de la Unión».

Una lucha que apenas comienza

Pese a la gravedad del escenario, Hernando insiste en que todavía hay margen de maniobra. «Esta es una propuesta para el periodo 2028-2034. Tenemos 2025 y 2026 para negociar y hacer presión. No daremos un paso atrás».

ASAGA Canarias se suma así a una movilización que ya cuenta con el respaldo de organizaciones agrarias de toda Europa. La prioridad: preservar el sistema actual, con presupuesto propio, normas comunes y atención diferenciada a las regiones ultraperiféricas.