La pandemia de la covid-19 agrava la situación de los enfermos cardiovasculares

Sara Bordes, jefa del servicio de Cardiología de HUSR de Las Palmas, señala que ahora comienza a normalizarse la asistencia a las consultas, pero teme que muchas patologías hayan empeorado.

La pandemia de la covid-19 ha agravado la situación de los pacientes con enfermedad cardiovascular, según indica Sara Bordes, jefa del servicio de Cardiología de Hospitales Universitarios San Roque de Las Palmas, que señala, sin embargo, que los enfermos ya comienzan a acudir a las consultas con mayor normalidad.

Empeoramiento de la enfermedad

Bordes indica que este año y medio de pandemia ha supuesto un inconveniente añadido a las personas que la sufren estas enfermedades porque han dejado de acudir a las consultas por el miedo a contagiarse de la covid-19. Esto ha repercutido en el control del seguimiento, lo que augura un empeoramiento de la enfermedad. Apunta que se han hecho estimaciones de que en los próximos años se van a generar miles de enfermedades cardiovasculares que se podían haber evitado.

Ahora comienza a producirse cierta normalización, gracias, entre otras razones, a que se ha hecho mucha promoción de la necesidad del control de la enfermedad y a las campañas para que los pacientes puedan confiar en las medidas para evitar los contagios en los centros sanitarios: “Podemos hablar de cierta normalidad”.


Día Mundial del Corazón

Este miércoles 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón, con el que se quiere tomar conciencia de que la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte a nivel mundial. Unos 520 millones de personas la padecen de alguna manera.

Bordes indica que lo principal es concienciar a la población sobre aquellos aspectos que inducen a la enfermedad y que se pueden prevenir, como son la obesidad, el tabaquismo, la hipertensión arterial, la diabetes, el estrés o el sedentarismo.

“Lo ideal es no llegar a desarrollar síntomas”, afirma Bordes, pero en caso de dolor torácico, falta de aire al hacer esfuerzo, palpitaciones, fuertes mareos o pérdida de conocimiento, hay que acudir a una consulta con el cardiólogo.