Hospitales Universitarios San Roque participa en una investigación internacional de un nuevo fármaco para el Parkinson

Laboratorio

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Es el único centro canario seleccionado para probar la eficacia de una fórmula para frenar la progresión de la enfermedad.

La Unidad de Parkinson y Trastornos del Movimiento de Hospitales Universitarios San Roque en Las Palmas de Gran Canaria, liderada por el doctor José M. Arbelo González ha sido seleccionada para participar en la segunda fase de un investigación internacional sobre un nuevo fármaco para retrasar la progresión del Parkinson.

Junto al Servicio de Medicina Nuclear, Hospitales Universitarios San Roque ya participó en una fase previa de esta investigación para comprobar la eficacia de un biomarcador para neuroimagen. En esta segunda fase del ensayo HUSR ha sido el único centro canario seleccionado, junto a otros 17 de ámbito nacional, además de hospitales de EEUU, Europa e India.

La elección de la Unidad de Parkinson y Trastornos del Movimiento de Hospitales Universitarios San Roque en Las Palmas de Gran Canaria radica en su alta tecnología y el nivel del equipo multidisciplinar con el cuenta al servicio de esta investigación: Neurología, Laboratorio, Dermatología, Farmacia, Medicina Nuclear, Radiología, además de Enfermería y Coordinación.

En ensayo se denomina ‘SPARC CLR_18_06’. Esta segunda fase consiste en determinar si el fármaco ‘K0706’ reduce la tasa de progresividad en etapas tempranas de la enfermedad de Parkinson, así como su seguridad y tolerabilidad. Para ello se contará con una muestra de más de 500 pacientes (en un etapa inicial de la enfermedad) seleccionados en todos los hospitales que participan en la investigación que comparará los resultados entre un grupo activo al que se administra diferentes dosis del fármaco, frente a otro grupo al que se administra un placebo. El tiempo de seguimiento será de 50 semanas.

Evitar la muerte neuronal

La enfermedad de Parkinson idiopática es un proceso degenerativo, progresivo que se manifiesta por temblor, rigidez, bradicinesia y cambio postural. Hasta ahora la ciencia no ha encontrado una cura para esta enfermedad y el tratamiento se centra en contener los síntomas.

Esta investigación persigue controlar la segregación de una enzima (Tirosina Kinasa Abelson), de una proteína neurotóxica (alfa-sinucleina fosforilada) así como evitar el estrés oxidativo mitocondrial para evitar la muerte neuronal.

“Los primeros resultados que han ido conociéndose hasta el momento de esta investigación, es que la molécula es bastante segura y bien tolerada, sin embargo, habrá que esperar que finalice el estudio y se obtenga todos los resultados y demostrar su eficacia. Para conocer la eficacia clínica y la reducción de los niveles de esta proteína neurotóxica se hace un seguimiento muy riguroso en el que se incluye controles analíticos, de neuroimagen, dermatológicos y valoraciones neurológicas”, explicó el doctor Arbelo.

Perfil del paciente

El doctor Arbelo explicó que pueden participar en este estudio hombres y mujeres mayores de 50 años, con enfermedad de Parkinson de reciente diagnóstico, que no hayan iniciado tratamiento para la enfermedad, excepto un medicamento conocido como IMAO-B, además de otros criterios de selectividad.

“Si se cumplen los criterios de inclusión y el sujeto desea participar voluntariamente, no le compromete a tener que finalizarlo si no lo desea”, explicó el doctor.

Aquellos pacientes que quieran consultar obre su posible inclusión en el estudio pueden contactar con el doctor Dr. José Matías Arbelo en el teléfono 928 40 40 40 Extensión 5150- 5151, o a través de la dirección de correo electrónico: Jose.Arbelo@hospitalessanroque.com