El abastecimiento en Las Palmas de Gran Canaria a comienzos del siglo XX

Panorámica de Las Palmas de Gran Canaria

Panorámica de Las Palmas de Gran Canaria

Antonio Piñeiro, director de Operaciones de Emalsa, continúa reconstruyendo la historia de cómo la ciudad llegó a tener un sistema integral de de agua.

Continuando la serie dedicada a la historia del abastecimiento de agua en Las Palmas de Gran Canaria, desde el siglo XV y hasta comienzos del siglo XX, Antonio Piñeiro continúa esta semana con los avatares a inicios del siglo pasado.

En esas fechas, la ciudad contaba con una población de unas 62.000 personas, lo que obligó al alcalde, Ambrosio Hurtado de Medoza, a encomendar a Felipe Gutiérrez un estudio para un mejor abasto de agua. Por ese motivo, se buscaron nuevas posibilidades a partir de las fuentes de agua de la cumbre.

En 1906 se aprobó la Ley nacional de Utilidad Pública, lo que permitió expropiar los terrenos necesarios, y en 1911 se publicaron las bases del concurso para realizar la infraestructura capaz de llevar el agua a la ciudad. El concurso lo ganó una empresa inglesa, que obtuvo una concesión por sesenta años. Sin embargo, en 1946, la empresa fracasó en su empeño debido a la falta de fondos y la ciudad recuperó el control del agua.