Honorio Galindo vincula a presiones políticas su destitución al frente de Turcón Ecologistas

Honorio Galindo al frente de una acción de Turcón

Honorio Galindo al frente de una acción de Turcón

El expresidente de la organización afirma que, en algún momento, personas cercanas al Cabildo de Gran Canaria, pretendieron que desistiera de sus reivindicaciones.

Honorio Galindo, expresidente del colectivo Turcón Ecologistas, vincula a presiones políticas su destitución al frente de la organización: “Es evidente que ha habido intereses políticos”, afirma, al tiempo que señala que “en la calle se dice que es Nueva Canarias quien ha presionado para que algunos temas se paralicen, y yo dije que estos temas seguirán su curso mientras estuviera en la presidencia”.

Entre los asuntos “molestos” señala la construcción de la central hidroeléctrica de Chira-Soria, la concesión de las licencias para la renovación de los hoteles del grupo Riu en Fuerteventura o la protección del pinzón azul.

Ofrecimientos para desistir

Señala que, desde hace algún tiempo se ha venido formando en el colectivo ecologista un cierto grupo contrario a las distintas reivindicaciones del grupo ecologista. A este respecto, indica que uno de los socios de la organización es el director general de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria. 

Desmiente que en alguna ocasión se le haya tratado de “comprar” su voluntad con dinero, pero recuerda que una persona vinculada al Cabildo de Gran Canaria le ofreció la posibilidad de ponerlo al frente de un centro de estudios de nueva creación.

Considera que el ecologismo ha servido como un trampolín para saltar a la política, algo de lo que se siente “un poco culpable” porque con anterioridad ha pensado que solo desde la política se podía avanzar en los ideales de protección del medio ambiente, pero ahora piensa que “quien entra en la política se contamina”.