Blanca Pérez: «Tiene que haber impuestos que reviertan en la conservación del territorio»

Blanca Pérez en el set de El Espejo Canario en el Cabildo de Tenerife

Blanca Pérez en el set de El Espejo Canario en el Cabildo de Tenerife

➤ «La presión sobre espacios naturales como Masca ha bajado de 100.000 a 24.000 visitantes al año» ➤ «El modelo de acceso con transporte público y tasa de servicios es el que mejor funciona» ➤ «Estamos activando un operativo contra incendios forestales con medios humanos, tecnológicos y militares»

La consejera de Medio Natural, Sostenibilidad, Seguridad y Emergencias del Cabildo de Tenerife, Blanca Pérez, defiende que el cobro de tasas por servicios en espacios protegidos es una herramienta eficaz para conservarlos y garantizar la seguridad de sus visitantes. Así lo expresa al referirse a la experiencia de Masca, donde la regulación ha logrado reducir la presión turística: «Estamos hablando de pasar de más de 100.000 personas al año a unas 24.000, con un promedio de 275 visitantes diarios», detalla.

Según Pérez, la situación que se vivía en ese entorno del macizo de Teno era insostenible. «Se metía a la gente entre dos paredes con condiciones meteorológicas precarias y los bomberos sacaban personas todos los días», recuerda. Frente a ello, el Cabildo ha apostado por regular el acceso a través del transporte colectivo y establecer una tasa por los servicios prestados, como guías, seguridad o movilidad.

Inversión y retorno de la tasa

La consejera subraya que los ingresos obtenidos a través de este sistema se destinan íntegramente a la conservación del entorno. «Solo en Masca estamos hablando de una inversión de más de un millón de euros anuales. Con la tasa recaudamos alrededor de 600.000, que revierten directamente en servicios como limpieza, regulación del tráfico o mantenimiento del sendero», explica.

El acceso cuesta 28 euros para quienes no son residentes en Tenerife, aunque los canarios tienen una bonificación del 50%. «Los residentes en la isla no pagan», aclara. Este modelo podría extenderse a otros enclaves como el Teide o el Pijaral, donde el Cabildo estudia ya la implantación de un sistema similar, también con vigilancia y cupos de visitantes.

La necesidad de una tasa de pernoctación

Más allá de las tasas vinculadas a espacios naturales, Blanca Pérez considera imprescindible avanzar hacia un impuesto insular por pernoctación. «No lo pagan los turistas, lo pagamos los que vivimos aquí», afirma. «Los municipios, incluso los que no son turísticos, prestan servicios a los visitantes y eso tiene que revertir en el sostenimiento del medio natural y la gestión de residuos y agua», añade.

El Cabildo estudia el encaje legal de esta figura fiscal y mantiene contactos con otros territorios que ya la aplican. «No se trata de un castigo, sino de una contribución justa al mantenimiento de nuestro entorno», recalca.

Alerta máxima por riesgo de incendios

La consejera también aborda la campaña contra incendios forestales, que este año se ha reforzado con el mayor operativo en la historia del archipiélago. «Estamos hablando de más de 250 personas, con refuerzo del Ministerio de Defensa para vigilancia, drones, cámaras y satélites», indica. Además, el Cabildo ha desplegado una estrategia de formación y limpieza en zonas de interfaz urbano-forestal, y ha firmado convenios con ayuntamientos para facilitar la autoprotección vecinal.

La consejera insiste en que la prioridad es la prevención: «La mayoría de los incendios comienzan en zonas habitadas, por lo que estamos mejorando la coordinación entre bomberos urbanos y forestales para una respuesta más eficaz».

Con estas medidas, el Cabildo de Tenerife busca equilibrar el desarrollo turístico con la protección de sus recursos naturales y la seguridad de la población. «No se trata solo de controlar el acceso, sino de garantizar un futuro sostenible para el territorio y quienes lo habitan», resume Pérez.