El presidente de Fepeco asegura que las oficinas técnicas municipales «se han convertido en cementerios de empresas»
El presidente de Fepeco, Óscar Izquierdo, lanza una crítica contundente a la situación administrativa de Canarias. Afirma que la comunidad autónoma sufre «una administración pública que no sirve, que no funciona, que es un muro infranqueable», y que los ayuntamientos han convertido sus oficinas técnicas en «verdaderos cementerios de empresas». Señala que, aunque la ley obliga a conceder una licencia de obra en tres meses, «el promedio en Canarias es de 18 a 20 meses» y que en muchos municipios «lo normal es que las licencias tarden más de cuatro años».
En su opinión, el problema no es de legislación, sino de funcionamiento: «Si algunos ayuntamientos demuestran que se puede tramitar en tiempo y forma, los demás no lo hacen porque no saben o no son capaces». El resultado, denuncia, es devastador para las empresas y para los ciudadanos que necesitan vivienda.
La burocracia como causa de la emergencia habitacional
Izquierdo no duda en atribuir responsabilidades directas por la falta de vivienda en Canarias: «Los culpables de que tengamos una urgencia habitacional, de que haya gente viviendo en chabolas o pagando alquileres disparatados, se llaman alcaldes, alcaldesas y funcionarios que no ejercen su labor».
Sostiene que, aunque se anuncien inversiones millonarias y programas de vivienda pública, nada de eso podrá materializarse si las licencias no se tramitan. «Sin licencia no hay vivienda», resume. Reclama que los ayuntamientos utilicen el decreto ley 3/2025 de simplificación administrativa, aprobado por el Gobierno de Canarias, del que afirma que «está funcionando en otras comunidades», pero que aquí «los ayuntamientos que peor funcionan le están dando la espalda».
Una nueva función pública y productividad real
El presidente de Fepeco considera imprescindible actualizar la ley canaria de función pública, vigente desde 1987. Propone introducir mecanismos de productividad medible y cuantificable en las oficinas técnicas, de forma que los empleados públicos sean evaluados por su rendimiento real y «no cobren lo mismo quienes trabajan mucho y bien que quienes no hacen casi nada».
Afirma que en algunos ayuntamientos se conceden apenas «tres o cuatro licencias al año» y que eso revela un problema de responsabilidad interna: «Tenemos empleados públicos muy buenos, pero también otros que dejan mucho que desear». Reclama que los alcaldes ejerzan su función de mando y pongan fin a lo que describe como «reinos de taifas» en las áreas de urbanismo.
Un diagnóstico duro para Tenerife
En materia de infraestructuras, Izquierdo afirma que Tenerife arrastra décadas de abandono y mala planificación. Asegura que la isla tiene «carreteras homologables a cualquier país centroafricano» y acusa a los responsables políticos de limitarse a «anuncios, infografías y parches» mientras las colas persisten.
Felicita, en contraste, a los responsables de Gran Canaria, que considera un ejemplo de gestión eficiente: «Tenemos en Gran Canaria carreteras homologables a cualquier país europeo». Reivindica la necesidad de impulsar el transporte guiado —trenes, tranvía y guaguas mejoradas— y de crear aparcamientos disuasorios que permitan liberar los centros urbanos del tráfico.
Más vivienda sin más legislación
El líder de Fepeco rechaza ampliar la regulación urbanística y sostiene que la normativa existente —incluida la Ley del Suelo y el decreto 3/2025— es suficiente. Lo que falta, insiste, es que funcione la administración: «Tenemos una madeja normativa que permite que un funcionario diga A y otro diga B, y el perjudicado siempre es el ciudadano».
Advierte de que mientras no se resuelvan los atascos municipales, la construcción de vivienda seguirá bloqueada y los precios continuarán disparados. «Los empresarios tenemos la capacidad para construir toda la vivienda necesaria, pero la administración lo impide», afirma. Llama a los ciudadanos a exigir responsabilidades en sus ayuntamientos: «Los jóvenes que no se pueden emancipar deben saber quiénes son los culpables».
Un mensaje final sin resignación
Izquierdo concluye con un llamamiento directo a los responsables públicos: «No estamos resignados. Vamos a seguir luchando para que Canarias tenga las infraestructuras y las viviendas que necesita». Y recuerda que el colapso administrativo no es solo un problema del sector de la construcción, sino «un bloqueo que está afectando a toda la sociedad y que exige soluciones urgentes».