Francisco Javier Chavanel y Mario Alonso salvan de la quema de esa década los clásicos de U2 y New Order.
A pesar de que los años ochenta del pasado siglo XX no fueron especialmente productivos en cuanto a la música, lo cierto es que Chavanel y Alonso no renuncian a encontrar en esos años algunas piezas dignas de formar parte de las mejores canciones de la historia.
Es el caso de "Sunday Bloody Sunday", una canción de la banda irlandesa U2 publicada en el álbum War (1983). Fue escrita a raíz del Domingo Sangriento irlandés de 1972, en el que murieron 14 personas. Chavanel señala que U2 hizo en sus inicios varias obras maestras, pero "llevan catorce años descansando y haciendo cosas horteras". La que presentamos es una canción muy valiente por cuanto pedía el cese de la violencia por ambos bandos.
Por su parte, Mario Alonso destaca "Leave me alone" de New Order, una banda renacida tras el suicidio de su primer vocalista, Ian Curtis. En otras circunstancias, un hecho así "hubiese hecho que la banda no hubiese salido adelante". Sin embargo, la canción que presentamos demuestra que se puede sobrevivir incluso a lo peor.