La rebelión de los introvertidos

Perro con mantita | Foto: PIXABAY

Perro con mantita | Foto: PIXABAY

El periodista cultural Javier Moreno expresa el “malestar” del sector de las personas introvertidas, que, repentinamente y a causa del confinamiento, han visto invadida su intimidad por todo tipo de videoconferencias, llamadas telefónicas y propuestas culturales.

Moreno señala que el confinamiento no ha supuesto la supresión de la vida social, sino que esta se ha trasladado al interior de las viviendas, de tal forma que se ha quebrado la distinción entre la vida pública y la vida privada. Ahora, señala, “todo es público” y así, podemos conocer los hábitos y costumbres que cada uno tiene en sus casas y hasta hacer fiestas en el cuarto de estar, “algo que no se hacía desde los años sesenta”.

El periodista señala la incomodidad y “la presión” que sufren los introvertidos al recibir innumerables ofertas para hacer videollamadas y mantener conversaciones con gente con la que ni siquiera tenían previsto hablar “nunca en la vida”. Asimismo, lamentan tener que hacer relaciones forzadas con el vecindario a través de los balcones.

En sustancia, dice Moreno, “la vida privada ya no es lo que era”, por lo que la reivindicación de las personas que han vivido toda la vida confinados por decisión propia es bastante simple: “Que nos dejen salir ya a la calle para disfrutar de la intimidad y la soledad perdida”.