Juan Méndez, jefe de Servicio de Promoción de la Salud de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, recuerda que entre los 60 y los 80 años «tenemos una serie de años en los que tenemos discapacidad debido a las enfermedades crónicas».
Juan Méndez, jefe de Servicio de Promoción de la Salud de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, sostiene que los buenos hábitos «nos van a salvar nuestra salud y nuestro bienestar» y que el reto está en aumentar los años vividos con buena salud, no solo la longevidad. Recuerda que entre los 60 y los 80 años «tenemos una serie de años en los que tenemos discapacidad debido a las enfermedades crónicas» y que la herramienta para «luchar contra esto» es la promoción de la salud. «Nada más y nada menos», subraya.
Méndez explica que la promoción de la salud «implica directamente la participación del ciudadano». Los sanitarios «acompañan, aconsejan, forman, informan y motivan», pero el cambio real llega cuando cada cual interioriza decisiones diarias sobre alimentación, ejercicio, descanso, salud oral y no fumar. «Eso es una cosa que tiene que estar interiorizado en cada uno de nosotros», afirma.
Escuela como palanca: ITES e ITES plus
El Servicio impulsa programas escolares de prevención. En tabaquismo, el proyecto ITES «abarca a los alumnos de enseñanza secundaria obligatoria los cuatro años», con formación a docentes y materiales específicos. «Aquellos niños que han pasado por este programa […] fuman un 50% menos que los que no han pasado por el programa», asegura, calificándolo de «exitoso». En paralelo, ITES Plus aborda el alcohol en secundaria, un consumo «asociado a la fiesta», ante el que el mensaje institucional es claro: «La OMS dice que alcohol cero […] Nosotros decimos, cuanto menos, mejor».
Vapeadores: el lobo con piel de cordero
El responsable advierte del auge del vapeo entre adolescentes: «La industria del tabaco se quiere meter a través de la grieta con los vapeadores» con la idea de que «no son dañinos como el tabaco». «Eso es falso», enfatiza: dispensan nicotina y contienen «otra serie de componentes que son perjudiciales». Este año lanzan una campaña en redes con una imagen inspirada en Caperucita Roja: «Por mucho que te cuenten el cuento, no te lo creas».
Méndez anuncia que la campaña digital contra el vapeo se repetirá «a final de año» y que continuarán las acciones educativas con docentes y familias. «Debemos invertir en niños y niñas», recalca, porque «todavía […] tienen una actitud modificable» ante el tabaco, el alcohol y los estilos de vida.
Playas sin humo y espacios saludables
Además de la prevención escolar, Salud Pública promueve «Playa Sin Humo», una iniciativa voluntaria para que los ayuntamientos delimiten arenales sin tabaco —o con zonas acotadas—, visibilizando «que los no fumadores somos la mayoría» y reduciendo la contaminación en la arena. «Ya es normal no fumar», recuerda, aludiendo al cambio cultural que expulsó el humo de consultas, exámenes, discotecas y bares.
Comer mejor y moverse más: alipa y receta de ejercicio
En primaria, el programa ALIPA —«promoción de la alimentación y actividad física»— enseña a los niños a alimentarse mejor y a «no ser sedentarios». Además, la Estrategia Canaria de Promoción de la Actividad Física se integra en Atención Primaria: los profesionales «prescriben actividad física» y derivan a centros especializados para que las personas «empiecen a moverse de forma sistemática». El objetivo: «esos 150 minutos de ejercicio aeróbico a la semana», con trabajo de fuerza y equilibrio.
Combatir el sedentarismo cotidiano
No basta con caminar «50 minutos diarios» si el resto del día transcurre «sentado viendo la tele». Méndez insiste en una vida activa: cocinar, limpiar, «sacar el perrito a pasear», hacer la compra, lavar el coche o «jugar con los nietos o con los hijos» cuentan como movimiento que protege la salud.