Sergio Rubira subraya el rigor de ‘Néstor reencontrado’ y la lectura contemporánea de un artista «clave»

Sergio Rubira en la presentación de la exposición | Foto: TEA

Sergio Rubira en la presentación de la exposición | Foto: TEA

El director artístico de TEA Tenerife Espacio de las Artes, señala que el artista «da casi el pistoletazo de salida a una modernidad específicamente canaria».

El director artístico de TEA Tenerife Espacio de las Artes, Sergio Rubira, presenta «Néstor reencontrado» como la primera gran antología dedicada en la isla a Néstor Martín-Fernández de la Torre, con más de doscientas piezas entre pinturas, dibujos, esculturas, libros, fotografías, fonogramas y archivo. La muestra, comisariada por Juan Vicente Aliaga, se inauguró el viernes 24 y puede visitarse gratuitamente hasta el 1 de marzo de 2026 (de martes a domingo y festivos, de 10:00 a 20:00). 

Diferencias respecto a Madrid y Gran Canaria

Rubira explica que el «grueso» procede del Museo Néstor, pero subraya que no es un calco de anteriores etapas: «La mayor parte viene de los fondos del Museo Néstor, pero luego también hay obras de otras instituciones y de coleccionistas privados, incluso hay alguna que no estuvo en el Reina Sofía». Entre ellas destaca «la Dama Austriaca», una pintura que «hace más de 100 años que no se veía en público» y que hoy se exhibe gracias al préstamo de un coleccionista privado de Tenerife. 

El relato curatorial y la «lectura desde la contemporaneidad»

El director artístico pone el foco en el planteamiento del comisario: «Destaco el rigor con el que Aliaga ha planteado esta exposición y la forma en la que ha pensado en Néstor, un relato pensado desde la contemporaneidad subrayando algunos de los elementos fundamentales en la figura y en la iconografía de Néstor». Rubira insiste en que «era el momento de presentar su investigación en torno a Néstor» en Tenerife. 

El arranque de una modernidad «específicamente canaria»

Preguntado por el núcleo de la obra, Rubira afirma que Néstor «da casi el pistoletazo de salida a una modernidad específicamente canaria»: viajes, influencias europeas y retorno al Archipiélago se integran en un lenguaje simbólico y escénico propio. La exposición recorre esa trayectoria en nueve secciones y sitúa al artista en diálogo con la cultura visual del primer tercio del siglo XX. 

Seguridad y montaje «tipo salón»

Sobre la ocupación espacial, Rubira precisa que la muestra ocupa «toda la sala A» de la planta primera e incorpora paredes adicionales con montaje «tipo salón», es decir, obras a diferentes alturas para reconstruir el gusto expositivo de la época. Y, con humor serio, despeja cualquier inquietud tras los últimos robos en museos europeos: «Aquí sería bastante más complicado porque nuestros muros son de hormigón y cámaras de vigilancia en todas las salas y asistentes de sala». 

Un proyecto de isla y de estado

«Néstor reencontrado» es una coproducción de TEA con el Museo Reina Sofía y el Museo Néstor, y se acompaña de catálogo ampliado con textos de especialistas. Para Rubira, el proyecto «adelanta muchos de los problemas que afrontamos hoy», y devuelve al centro a «uno de los artistas fundamentales, no solo de la modernidad canaria, sino también de la modernidad de todo el Estado y de los contextos internacionales en los que estuvo».