Roque Calero: “Si Chira-Soria es imparable, hay que exigir compensaciones”

Roque Calero (izq.) junto a Antonio Morales en 2017 | CABILDO DE GRAN CANARIA

Roque Calero (izq.) junto a Antonio Morales en 2017 | CABILDO DE GRAN CANARIA

El catedrático de Ingeniería Mecánica de la ULPGC considera que la central hidroeléctrica no es peor alternativa al almacenamiento de energía en baterías de litio.

El catedrático de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), Roque Calero, considera que si el proyecto de la central hidroeléctrica de Chira-Soria, en Gran Canaria, se está planteando como algo “imparable”, entonces es imperativo “exigir compensaciones medioambientales”.

Calero entiende que en la actual coyuntura, es preciso acumular las energías renovables, pero eso pasa, primero, por eliminar las infraestructuras de ciclo combinado, porque son las que impiden que la producción de renovables suba por encima del 40% en el mix energético. 

Alternativas al almacenamiento

Las dos opciones disponibles actualmente son las de baterías de litio y las centrales hidroeléctricas, cada una con sus pros y sus contras. Considera que las ventajas de la central hidroeléctrica de Chira-Soria es que se trata de una tecnología madura con unos embalses ya existentes. Además, no genera residuos y lleva agua a lugares en altura, por lo que está disponible para regar el campo. A esto se añade el reto de una obra de ingeniería importante. Sus desventajas residen en que es una obra costosa, que depende de una desaladora y que produce un impacto ambiental que “puede y debe compensarse”.

Por su parte, las baterías de litio tienen menor impacto ambiental y no requiere de grandes obras, pero su coste es alto en comparación con las centrales hidroeléctricas y su vida útil es limitada, además de que genera residuos: “No hay una ventaja clarísima ni una solución única”.