Míchel Jorge Millares: “Lo urgente con el proyecto de Chira-Soria es atajar la emergencia climática”

Presa de Soria | CABILDO DE GRAN CANARIA

Presa de Soria | CABILDO DE GRAN CANARIA

El periodista y portavoz de una iniciativa ciudadana en defensa de la infraestructura energética llama a distinguir entre ecologismo y conservacionismo: "No vamos a perder calidad de vida por perder un paisaje".

El periodista y portavoz de la iniciativa ciudadana “Sí al proyecto Chira-Soria”, Míchel Jorge Millares, distingue entre las personas que defienden la conservación del paisaje de la zona del embalse de Chira-Soria en Gran Canaria y los que plantean que lo urgente es “atajar la emergencia climática”. Su plataforma se ubica entre estos últimos, pues, a su juicio, la infraestructura evitaría el consumo de fuel contaminante que se emiten actualmente a la atmósfera: “Una cosa es el conservacionismo y otra es el ecologismo, que es la conservación sostenible del planeta”. Está convencido de que no se va a perder calidad de vida por perder un paisaje determinado. 

Considera que el proyecto trata de aprovechar dos instalaciones ya construidas para tener una reserva de electricidad alternativa a las renovables originadas por el viento y la energía solar. El proyecto solo sería “caduco” si se tuvieran que construir las presas, “pero aquí hablamos de embalses que ya tenemos y que han estado infrautilizados”.

Solvencia de las infraestructuras

Entiende que las infraestructuras ya existentes son solventes, pues, en caso contrario, no se entendería que empresas privadas quisieran invertir tanto dinero en un proyecto que no fuera seguro. En cualquier caso, piensa que este problema puede resolverse a través de los estudios viabilidad: “Pero si sirven hay que aprovecharlas”.

Defiende el uso de las torretas para canalizar la energía y está convencido de que el estudio de impacto ambiental que se conocerá en abril incorporará la reducción de su número respecto a lo inicialmente planteado por Red Eléctrica Española. Entiende que si bien el Cabildo de Gran Canaria llegó a plantear el soterramiento del cableado, eso supondría una galería muy extensa, con uso adicionales de terrenos y la necesidad de incorporar vehículos muy pesados a la obra, lo que en conjunto se traduciría en un mayor impacto ambiental.