Empresarios turísticos esperan que octubre sea el punto de inflexión de la pandemia

José María Mañaricúa | FEHT

José María Mañaricúa | FEHT

José María Mañaricúa, presidente de la FEHT, es partidario de un toque de queda para evitar los botellones.

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), José María Mañaricúa, espera que el mes de octubre sea el punto de inflexión de la pandemia de la covid-19 y suponga el momento en que vuelvan los turistas en número similar al del año 2019.

Asegura que, para entonces, ya debería estar vacunada el 80% de la población europea, magnitud que, a juicio de los expertos, debe suponer el momento en que los contagios “caigan en picado”. 

El Reino Unido y los semáforos

Hasta entonces, la temporada de verano se sustanciará con el turismo local, los peninsulares que puedan venir y el que permita la apertura de las restricciones del Reino Unido. Maricúa recuerda, a este respecto, que en el plazo de dos o tres semanas, el Reino Unido volverá a revisar la situación epidemiológica y, si el semáforo de Canarias continúa en ámbar, podrán seguir llegando los turistas, “pero si pasamos a rojo, no”.

En ese sentido, es partidario de restringir la movilidad en horas nocturnas, estableciendo un toque de queda entre las 00.30 y las 6.00, ya que no hay suficiente número de agentes de la autoridad para evitar los botellones y las concentraciones de jóvenes. Lamenta que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias no lo haya entendido así.

Situación económica del sector

Mañaricúa espera que la temporada turística de invierno ponga fin a casi dos años en los que el sector ha tenido que hacer frente a enormes dificultades económicas. Afirma que los 1.144 millones de ayudas extraordinarias dispuestas por el Ministerio de Hacienda, unidos a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) es lo que ha permitido “aliviar la sangría” durante todos estos meses.