José María Monzón, presidente de la junta de personal del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, afirma que frente a los 240 operativos previstos, solo hay 186.
Monzón señala que la situación de los bomberos es precaria, pues tienen que llevar a cabo sus funciones con 186 efectivos, cuando la relación de puestos de trabajo establece un mínimo de 240. Faltan unos sesenta efectivos, lo que explica que en muchas ocasiones solo haya tres agentes en el parque del Polígono de Arinaga o en el de Telde. Monzón señala que si los tres agentes en el parque de Telde tienen que atender una incidencia en Jinámar y son llamados a otra en Valsequillo no podrán atenderla adecuadamente y recomienda a los vecinos "rezar": "Lo que pedimos son dotaciones mínimas. Llevamos tiempo diciendo que se pueden producir desgracias y ya han habido situaciones de alto riesgo".
Ante esta situación siguen "sin noticias" del presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, al que acusan de "dejadez" en resolver el problema. Monzón señala que se ha especulado con la desaparición del Consorcio, un deseo de algunos ayuntamientos, pero "con la legislación actual, el Consorcio no se puede disolver" porque la ley establece que el Cabildo debe proporcionar el servicio a los municipios de menos de 20.000 habitantes, al tiempo que los ayuntamientos con más de esa población deben tener su propio servicio o consorciarse.
Por eso piden al Cabildo una solución "a medio y largo plazo" porque llevan años con esta problemática. Señala que el problema es que el Cabildo tiene que pagar los servicios de once ayuntamientos y su propio servicio, es decir, más o menos el 70% del presupuesto del Consorcio. El resto lo sufragan los otros municipios. Afirma que este mismo año se deben adecuar los estatutos del Consorcio a la legislación, para que los bomberos pasen al régimen laboral del Cabildo, "y eso es lo que tratan de evitar".