Augusto Hidalgo: “Tenemos que ser el baluarte de la salida del túnel”

Augusto Hidalgo | Foto: EL ESPEJO CANARIO

Augusto Hidalgo | Foto: EL ESPEJO CANARIO

El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria asegura que nunca ha estado sobre la mesa el confinamiento de toda la ciudad.

Augusto Hidalgo aboga no solo por “apagar los fuegos” de la crisis provocada por la pandemia de covid-19, sino también por poner las luces largas y pensar en los escenarios para el momento en que desaparezca la enfermedad. En este contexto, el alcalde capitalino se propone que la ciudad sea un “baluarte” en la salida de “este túnel” con la finalidad de que retome la senda del crecimiento.

Entre los fuegos que tiene que apagar, pone de relieve que 14.000 personas dependen cada día del Ayuntamiento para comer, personas que no estaban siendo atendidas por servicios sociales, “sustancialmente, personas clase media”.

Recuperar la senda de crecimiento

El alcalde señala que, durante su mandato, se ha desarrollado el mayor proceso de inversión de la historia de la ciudad, un pulso que se ha mitigado durante la pandemia pero que no renuncia a recuperar en un futuro cercano. Apunta que la forma de llevar a cabo estas inversiones es por la vía de inyectar recursos públicos, particularmente a través de la obra pública, lo cual supone que el sector de la construcción esté generando empleo incluso durante la pandemia. No obstante, recalca que es preciso recuperar el sector turístico y para ello espera que en el mes de noviembre retornen los cruceros a la ciudad.

Contundencia en el cumplimiento

Hidalgo es taxativo cuando señala que en ningún sitio se ha sido tan contundente como en Las Palmas de Gran Canaria en lo que respecta a hacer cumplir las normas para combatir la covid-19. Así, indica que se han impuesto más de 2000 multas, se ha utilizado drones y se ha impedido el acceso a zonas “donde sabíamos que había concentración de gente joven”. No obstante, recuerda que el municipio es el de mayor población y mayor número de movimientos, lo que explica la mayor extensión de la enfermedad. Recalca que la mayoría de la ciudadanía “se está comportando”, pero “si una minoría no lo hace, tiene un efecto exponencial con una capacidad de hacer daño”.

Asegura que en ningún momento se ha puesto sobre la mesa el confinamiento de toda la ciudad, pero sí el confinamiento selectivo de algunas zonas o barrios, algo “muy complicado”. Se ha preferido optar por el cribado masivo, como en el caso del populoso barrio de La Isleta, “con unos datos muy bajos de incidencia”.

Remanente y superávit

El Ayuntamiento cuenta con 290 millones de euros de remanente y 50 millones de superávit de otros ejercicios, cantidades que no se han podido utilizar debido al rechazo del Congreso a la iniciativa del Gobierno de Pedro Sánchez. Hidalgo descarta que en algún momento se haya hablado de que el Ejecutivo central se iba a quedar con los remanentes: “La mayoría de los ayuntamientos aprobaron un acuerdo en el que nos quitaban el techo de gasto, nos daban dinero para cubrir pérdidas en transporte y se incorporó un elemento para poder utilizar los remanentes que era la fórmula de préstamo voluntario”. Ahora, dice, se está negociando este acuerdo por trozos, pero “con meses perdidos”.

Tragedia de la inmigración

Sobre la atención a los inmigrantes que llegan a Canarias, el alcalde señala que el verdadero problema, “la tragedia”, es lo que sucede en el mar, en el que han perdido la vida unas 130 personas en lo que va de año: “Eso es lo realmente dramático”. Asegura que lo que le “revuelve” es que el escándalo se produzca cuando esas personas entran en un hotel o se les ve bañándose en una piscina, algo “profundamente racista”. Asegura que a partir de esas imágenes, muchas personas comenzaron a darse cuenta de que en Arguineguín había personas en esas condiciones, algo “que se lleva produciendo desde el año pasado”.