Amós García: «La pandemia nos enseñó que nunca, nunca, nunca puede haber recortes en sanidad»

Amós García en los estudios de El Espejo Canario

Amós García en los estudios de El Espejo Canario

El jefe de epidemiología y prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias se jubila el próximo 28 de junio tras cuarenta años de trabajo «que dan para mucho».

El jefe de epidemiología y prevención de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, Amós García, se jubila el próximo 28 de junio, tras cuarenta años en el mundo de la salud pública: «Muchos años que dan para mucho»

Su cara se hizo muy conocida en Canarias durante la pandemia de la covid-19, una etapa de su vida en la que afirma que ganó «más amigos que enemigos», aunque estos últimos han llegado a ser muy molestos. 

Discursos del odio

«La pandemia nos cogió a todos con el pie cambiado», afirma, al tiempo que considera que quizás se podía haber sido más prudente en algunas cosas, como cuando se dijo, en un primer momento, que no era necesario el uso de las mascarillas. 

Afirma no entender por qué el discurso científico está sometido a ese discurso del odio que ha motivado los movimientos antivacunas. Considera que se usó como excusa para tensionar y crispar el ambiente con intereses políticos.

Una nueva pandemia

Durante nueve años fue, además, presidente de la Asociación Española de Vacunología y forma parte del grupo permanente para Europa de la Organización Mundial de la Salud. Desde estas atalayas ha podido comprobar que las probabilidades de aparición de una nueva pandemia son muy altas, porque siguen presente los condicionantes, como el cambio climático y el calentamiento global, que distorsiona toda la ecología de los microorganismos, la globalización y la pobreza, que es un elemento clave para la transmisión de enfermedades: «Tenemos que entender de una vez que la salud humana no se puede desligar de la salud ambiental».

Considera que si algo se ha aprendido de esta pandemia es que el sistema sanitario no puede ser motivo de recortes «nunca, nunca, nunca».