La ZEC abre un debate sobre la necesidad de adaptar sus requisitos a las necesidades actuales de la economía

Pablo Hernández (izq.) reunido con Ángel Víctor Torres y Elena Máñez el pasado enero | PRESIDENCIA DEL GOBIERNO DE CANARIAS

Pablo Hernández (izq.) reunido con Ángel Víctor Torres y Elena Máñez el pasado enero | PRESIDENCIA DEL GOBIERNO DE CANARIAS

Su nuevo presidente, Pablo Hernández, recalca que las condiciones son hoy muy distintas a las del momento de su constitución en los años noventa.

El recién nombrado presidente de la Zona Especial Canaria (ZEC), Pablo Hernández, señala que la institución está llevando a cabo un profundo debate sobre su propia estructura, así como de los requisitos que deben cumplir las empresas para su implantación, con el objeto de que siga siendo un instrumento apropiado para las necesidades económicas actuales. 

Afirma que asume el cargo con “ganas y mucha responsabilidad” por lo complicado de la situación económica “de la que aún no sabemos cuando vamos a salir”. Sus principales líneas de actuación, apunta, serán buscar la sinergia con la economía local e impulsar la ZEC en un año “complicado”, cuando “la situación está empezando a pasar factura a las empresas”. Sin embargo, informa de que el año 2020, aún con datos provisionales, no fue malo. 

Inversiones predominantemente europeas

Destaca que, entre las empresas implantadas, hay un amplio predominio del sector tecnológico, las empresas de energías renovables y de distribución mayorista. En su gran mayoría, un 70%, son de capital extranjero, mientras que el resto son inversiones mixtas o de capital canario. Entre las nacionalidades, predominan las empresas Europeas, y entre ellas las de Alemania, Reino Unido e Italia.

Nuevo horizontes

Pablo Hernández considera que, para que haya seguridad jurídica, lo conveniente es no cambiar radicalmente los requisitos de admisión en la ZEC, “pero se podría contemplar una flexibilización, que es algo que estamos estudiando”. Considera que el debate debe abordar tanto las condiciones de las empresas ya instaladas como los requisitos se necesitan para seguir atrayendo inversiones tras su fundación en los años noventa “que era otro contexto”.

Entiende que, muy posiblemente, haya que hacer algunos ajustes: “Hay que estudiar por qué algunas empresas fallan en su instalación”. Apunta que las empresas que mayor éxito han tenido son las que se instalaron en la crisis anterior: “Tal vez eso signifique que en momentos de crisis se abordan proyectos de menor riesgo”.