El miembro de la directiva de la Asociación Española de Pediatría (AEP) afirma que los profesionales están desbordados por la triplicación de los casos que tienen que atender.
El miembro de la directiva de la Asociación Española de Pediatría (AEP), Pedro Javier Rodríguez, asegura que estamos ante una “auténtica pandemia” de salud mental que “está destruyendo a nuestros adolescentes”.
El miembro de la Sociedad de Psiquiatría Infantil (SPI) y especialista del Hospital infantil y juvenil Diego Matías Guigou y Costa afirma que los especialistas están “muy preocupados” con el incremento de las consultas, que se han doblado y triplicado respecto a los datos de antes de la pandemia de la covid-19.
Señala que en en el primer momento, del del confinamiento, los especialistas se sorprendieron por una resistencia psicológica mayor a la esperada: “Pensábamos que iba a traer más problemas”. Pero,a partir de octubre de 2020, cuando se produjo una cierta normalización, la sintomatología se disparó a unos niveles “nunca pensados”: “Estamos ante una auténtica pandemia que está destruyendo a nuestros adolescentes”.
Ansiedad social
Señala que estas patologías afectan, muy especialmente, a las personas más vulnerables, que son más sensibles a las medidas como las de la distancia social, el uso de las mascarillas y las noticias que a diario aparecen en la televisión. Eso hace crecer la ansiedad social, que está ahora a un nivel un quince por ciento superior a antes de la pandemia: “Todos estamos más alterados, a lo que se añaden las dificultades económicas y las del día a día”.
Asegura que los profesionales están “totalmente desbordados” por los muchos trastornos que tienen que atender, incluyendo a niños que sueñan reiteradamente con la inminente muerte de sus padres. A estos se siguen problemas como los de la anorexia, el insomnio, las idas de suicidio y todo tipo de dolores: “El edificio va a quedar torcido y a ver quién lo endereza después”.
Temen que se produzcan figuras terciarias como el incremento en el consumo de sustancias tóxicas, depresiones a largo plazo y el aumento del consumo de las nuevas tecnologías: “El camino va hacia una generación perdida”.
“Ponerse las pilas ya”
Por estas razones, instan a las administraciones públicas a arbitrar un protocolo de salud mental infanto-juvenil: “Lo que no puede ser es que nos vuelva a coger a traspiés. Hay que desarrollar planes, como el de la prevención de suicidio en adolescentes o la creación de la especialidad de psiquiatría infanto-juvenil, que es una auténtica vergüenza y que encima no cuesta dinero. Hay que empezar a ponerse las pilas ya, no mañana”.
Vacunación cuanto antes
Pedro Javier Rodríguez es partidario de proceder a la vacunación de los menores “cuanto antes” porque esto va a incidir de manera positiva en todos los aspectos de la salud: “Cualquier efecto secundario va a ser infinitamente menor que el efecto del coronavirus en la salud”. Recuerda que la edad actualmente establecida para la vacunación es la de mayores de 12 años y supone que irá bajando en el futuro.