“Bassiri siempre fue un hombre pacífico”

El profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Esparza, analiza quién era Bassiri después de cumplirse 50 años de su desaparición tras ser detenido por la policía española.

Mohamed Sidi Brahim Basir, más conocido como Bassiri, nació en el seno de una familia saharaui tradicional en torno a 1942. Un estudiante titulado, formado en una cofradía religiosa de su familia “la cofradía Bassiri, de la que él toma el nombre”, relata Rafael Esparza, profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

En Marruecos estudió primaria y secundaria y terminado el bachillerato realizó estudios de periodismo en El Cairo, Siria y Líbano. A su vuelta, funda el periódico Al Shihab (La Antorcha) y publica en este y otros periódicos opiniones críticas con la doctrina expansionista marroquí liderada por el partido Istiqlal. Como consecuencia, se ve obligado a escapar y cruza clandestinamente la frontera sur, estableciéndose en Smara, ya en territorio del Sahara español, hacia 1968.

Según Esparza, a consecuencia de la manifestación de Jata Rambla el 17 de junio de 1970, que el propio Bassiri “había aconsejado no hacer al ser contraria a la que plantaban las autoridades españolas en el centro del Aiun”, a pesar de ello fue detenido al día siguiente por la policía española y trasladado por diferentes cárceles y ahí se pierde su pista.

En el caso de Bassiri “estamos hablando de un líder ambivalente, religioso y político”. Según Esparza, lo que sí está demostrado que en un momento determinado funda un partido político de tipo religioso denominado Organización Avanzada para la Liberación del Sáhara con unos estatutos “con planteamientos principalmente religiosos”.

Recordar que en la actualidad el Frente Polisario reivindica la figura de Bassiri “como una especie de Juan Bautista. Es quien anticipa la llegada del Polisario”, añade Rafael Esparza.

Se trata de la historia apasionante de un personaje que desapareció en extrañas circunstancias hace ya 50 años y que detalla durante esta entrevista Rafael Esparza, profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.