Su objetivo es convertir las instalaciones en un "trampolín" para la promoción de las Islas en la capital.
Las elecciones se convocaron hace veinte días y Roberto Miño, que ha dirigido la casa de Canarias en Madrid durante los últimos cuatro años, presentó su lista "con personas muy variadas". Este jueves concluía el plazo y Miño recibió la sorpresa de que los socios, que llenaron la casa, le informaron que no habría otra lista y lo aclamaron como presidente: "Fue una acto muy bonito".
Recuerda que cuando asumió el cargo, la casa tenía una gran deuda, con una media de edad muy alta de los socios y con escasas actividades. Asegura que, desde entonces, han hecho un trabajo de renovación respetando la tradición.
El objetivo para los próximos cuatro años es mantener y, a ser posible aumentar, el número de 20.000 personas que en estos cuatro años han pasado por la casa: "Seguir creciendo y consolidar el proyecto de que la gente vea la casa como un trampolín y un ejemplo".