Semana Europea de la Lactancia en Canarias

Inauguración oficial de las I Jornadas Autonómicas de Promoción de la Lactancia Materna | Foto: Gobierno de Canarias

Inauguración oficial de las I Jornadas Autonómicas de Promoción de la Lactancia Materna | Foto: Gobierno de Canarias

La pediatra de la Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud, Alicia González de Eusebio, recuerda que no es solo un alimento, «sino que conecta, protege y nos ayuda a cuidar el planeta».

La pediatra de la Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud, Alicia González de Eusebio, enmarca la Semana Europea de la Lactancia Materna en un impulso formativo que reúne en Fuerteventura a profesionales de todas las islas —y también de la península— para compartir experiencias, actualizar protocolos y reforzar redes de apoyo. Explica que las jornadas se celebran en la isla majorera porque allí se entrega el reconocimiento IAN a la «iniciativa para la humanización de la asistencia al nacimiento y la lactancia», un hito que —subraya— compromete a centros de salud, hospitales y comunidad. 

Una hoja de ruta: humanización y sostenibilidad

González de Eusebio destaca que la conferencia inaugural traza «una hoja de ruta de la promoción de la lactancia en España» y sitúa el lema común en la «humanización y la sostenibilidad». Recalca que la lactancia «no es solo alimento, sino que conecta, protege y nos ayuda a cuidar el planeta», al ser «el primer alimento sostenible: no tiene residuos, no tiene envases». El enfoque —insiste— incluye la «sostenibilidad emocional» de las familias y la creación de redes de apoyo, especialmente relevantes en un archipiélago con condicionantes de insularidad. 

Salud mental y «matricencia»

La pediatra pone el foco en la salud mental en el posparto y en el concepto de «matricencia», ese tránsito vital que «cambia hormonalmente» y afecta «en todas las esferas» cuando una mujer se convierte en madre. Aboga por detectar de forma temprana los trastornos emocionales, acompañar y «cuidar el bienestar mental y social» con recursos profesionales y comunitarios: «Cuanto más acompañadas esté la mamá, más grupos de apoyo tenga, el apoyo es fundamental». 

El papel del pediatra y del equipo sanitario

«El pediatra tiene un papel fundamental», afirma, porque es un referente al que «las madres confían 100%». Explica que su labor, junto a matronas y enfermería, pasa por «fomentar», «empoderar» y «cerciorarnos de que ese bebé está bien», sin olvidar la formación que llega «incluso al personal de limpieza del hospital» en entornos acreditados. Defiende una asistencia «más humana y segura», apoyada en protocolos del SCS para acompañar dificultades de inicio o mantenimiento de la lactancia. 

Conciliación y políticas públicas

González de Eusebio remarca que la información clínica necesita apoyo institucional: «Tenemos que llamar a la puerta de políticas públicas que vengan de la mano y ayuden a esa conciliación». Señala la importancia de espacios adecuados de lactancia, tiempos compatibles en el trabajo y entornos que reduzcan la carga de estrés y falta de sueño, factores que condicionan el éxito del proceso. 

Apoyo comunitario frente a la soledad

La especialista observa que la «sociedad actual» vive «más individualmente», con menos transmisión de saberes entre generaciones y «sentimientos de soledad» que dificultan la lactancia. Propone reforzar grupos de apoyo presenciales en todas las islas —«aunque sea una isla pequeñita»— y cita iniciativas que conectan a madres y matronas también por mensajería en islas como La Gomera. «Necesitamos volver un poquito al piel con piel, a hablar, a estar juntos, a compartir experiencias», resume. 

Beneficios y recomendaciones, sin culpabilizar

Sobre pautas y duración, recuerda las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud: lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y, a partir de ahí, junto a otros alimentos «hasta los dos años» o mientras «la mamá y el bebé lo quieran alargar». Pero insiste en que «cada caso es un mundo» y que los profesionales no deben «culpabilizar a nadie»: «Asesorar, recomendar y acompañar sea como fuere», porque incluso una misma madre puede vivir lactancias distintas con cada hijo. 

Dudas frecuentes y empoderamiento

Entre las consultas habituales, menciona la «inseguridad» sobre la producción de leche y aspectos prácticos como el agarre. Defiende mensajes claros y de refuerzo positivo: «Si tienes leche, te vamos a ayudar y vas a tener una lactancia exitosa; pero si no, te vamos a ayudar también con los recursos necesarios a cada mamá». El objetivo —incide— es sostener a la mujer y vigilar el bienestar del bebé, combinando acompañamiento, formación y derivaciones cuando sea preciso. 

Un reconocimiento para Fuerteventura

La elección de Fuerteventura como sede de las jornadas se explica por el «broche final»: la concesión del galardón IAN que acredita a la isla por su contribución a una atención «más humana y respetuosa durante el embarazo, el parto y la lactancia». La pediatra confía en que «poco a poco el resto de las islas vayan siguiendo ese ejemplo» y valora el aprendizaje compartido que dejan las sesiones.