¡Vete 2020! (porque no todo va a ser una mierda)

Primeras vacunas en España | Foto: SECRETARÍA DE ESTADO DE COMUNICACIÓN

Primeras vacunas en España | Foto: SECRETARÍA DE ESTADO DE COMUNICACIÓN

María Chavanel, que se despide hoy tras más de once años de trabajo en El Espejo Canario, nos deja este resumen de un año al que, difícilmente, cabe detestar más.

El año 2020 empezó con ganas, “como un bucle” con los problemas políticos de siempre, pero pronto llegó aquella profética calima durante los días del carnaval que nos obligó a llevar mascarilla por algunas horas. Pero, sin apenas darnos cuenta, se inició un nuevo bucle, el bucle definitivo que ha dado forma a un año aciago en el que nos hemos pasado los días subiendo curvas para después doblarlas.

“Queremos respiradores”, “queremos mascarillas”, “queremos epis” y “los queremos ahora” sustituyeron a lemas clásicos como “queremos que nos reconozcan nuestra condición de perificidad” o “queremos que el CD Tenerife (o la UD Las Palmas) suban a primera”.

Fue el año de la crisis migratoria, el año en que los ministros vinieron a prometer, prometer, prometer y no dar, no dar y no dar. Fue el año de Fernando Simón y Amós García. Fue el año, en definitiva, en que aprendimos que la palabra esperanza pertenece a la misma declinación que la palabra confinamiento.

Fue el año en el que habrá que esperar al último día para poder celebrar que por fin se acaba. Porque el 2021 trae esperanza. La esperanza de que, como dice Marian Álvarez, “no todo va a ser una mierda”.