Isabel Guerra, concejal de Nueva Canarias, culpa al alcalde por permitir el "desmadre total" en un pleno en el que se le preguntaba por los imputados de Aguas de Teror.
Según Guerra, los hechos se produjeron en el marco de un pleno en el que la oposición trataba de preguntar por las responsabilidades de un concejal imputado en el caso de Aguas de Teror. Según su versión, el alcalde se comportó "de manera dictatorial" sin deja hablar a los concejales, llegando a pedir a la policía local que detuvieran a un concejal de Podemos.
La persona agredida se encontraba entre el público grabando el pleno. Cuando le intentaron quitar el móvil para que no grabara, el vecino se fue del pleno y el concejal de Cultura, Henoc Acosta, "lo siguió y lo agredió".
Según Guerra, el alcalde permitió este "desmadre absoluto" por no saber llevar la corporación: "No puede decidir de lo que se habla o no se habla en un pleno. Y como no le gustaba lo que estaba oyendo suspendió el pleno, vulnerando los derechos fundamentales de los que representamos a la ciudadanía".