La exconsejera de Educación del Gobierno canario afirma tener la «conciencia tranquila» y considera que los que han perdido su plaza no tienen por qué quedarse sin trabajo.
La exconsejera de Educación del Gobierno canario, Manuel Armas, afirma tener la «conciencia tranquila» porque está convencida de que el ejecutivo anterior, presidido por Ángel Víctor Torres, hizo todo lo posible para que el mayor número de docentes en situación de interinos se quedara con su plaza tras el proceso de estabilización.
Convocatoria estatal
Afirma que movieron todos los hilos con el Ministerio de Educación o la Abogacía del estado, pero no hubo manera de asegurar las plazas. Así, señala que ya en julio del 2022, en una entrevista, ya dijo que no se podía garantizar que las plazas se las quedaran los que ya la estaban ocupando, porque las oposiciones se convocan bajo la cobertura de un decreto estatal.
A modo de ejemplo, señala que de las seiscientas plazas convocadas en Asturias, más de trescientas no se la han quedado asturianos; «Es más llamativo en Canarias porque aquí la interinidad es mayor y se sacaron más plazas».
Críticas de UGT
Respecto a las críticas de UGT sobre que la Consejería de Educación no se esforzó en alcanzar el mismo acuerdo que en sanidad, Armas señala que existen actas de las mesas sectoriales en las que se puede conocer la posición de cada cual. En cualquier caso, la exconsejera recuerda que el cuerpo de funcionarios de educación no tiene nada que ver con el de sanidad.
«Seguimos teniendo necesidad de docentes»
Señala que ahora están pendientes de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia Europeo, que puede ir en la misma línea que los trabajadores laborales. En ese caso, «estaríamos salvados».
Pero aún así, considera posible que los que han perdido la plaza puedan seguir trabajando, «porque seguimos teniendo necesidad de más docentes. Tienen sitio donde estar porque se tienen que seguir bajando las ratios».