Airam Puerta, primer teniente de alcalde de la localidad tinerfeña, señala que el sobrecoste de las obras desbordó las previsiones del Ayuntamiento.
Las siete familias realojadas del barrio de Bajo de La Cuesta en el municipio tinerfeño de Güímar se enfrentan a un desahucio por el incremento del coste de las obras, inasumibles para la corporación municipal, según señala el primer teniente de alcalde, Airam Puerta.
Los hechos se remontan al año 2020, cuando, tras unas mareas, los informes de la Policía Local emitieron un informe de afección de siete viviendas. El Ayuntamiento encargó un informe técnico que declaró el riesgo inminente de derrumbe. Puerta, que entonces era alcalde, indica que en ese momento solo tenía dos opciones: desalojar a los vecinos por la vía del desahucio judicial o plantear una obra de emergencia.
De 350.000 a un millón de euros
Optando por la segunda opción, se hizo una valoración económica de la rehabilitación que ascendió a 350.000 euros, algo que el Ayuntamiento se podía permitir. Se adjudica la obra y la adjudicataria llega a un acuerdo de realojo para una obra prevista para tres meses.
Pero entonces comienzan a aparecer informes que alertan de una necesaria desviación presupuestaria, pues el presupuesto inicial no iba a cubrir el coste real de la obra, que sobrepasaba el millón de euros. El 24 de agosto de 2021 se paraliza la obra y la adjudicataria deja de pagar los alquileres, por lo que los juzgados abren expedientes de desahucio.
Puerta señala que ahora está a la espera de que el Gobierno de Canarias señale si se puede sacar adelante el decreto de adjudicación de las obras.