El portavoz de la Federación Regional de Cofradías de Pescadores de Canarias, David Pavón, alerta de que la iniciativa «destruiría la pesquería artesanal» y tendría un impacto ecológico «brutal».
La Federación Regional de Cofradías de Pescadores de Canarias ha manifestado su rechazo «absoluto» a la propuesta de implantar en el Archipiélago la pesca de cerco de atún rojo mediante un proyecto piloto promovido por el Gobierno de España y trasladado a la Unión Europea para su aprobación. Su portavoz, David Pavón, afirma que la iniciativa supone «una pesquería industrial ajena al modelo canario» y que, de prosperar, «sería el fin de la pesca artesanal en las Islas».
Un modelo incompatible con el ecosistema
Pavón explica que el sistema de cerco, que encierra bancos completos de atunes para trasladarlos a jaulas de engorde, resulta inasumible en Canarias por su elevado impacto ambiental. Asegura que, a diferencia del Mediterráneo, donde estas prácticas se desarrollan con menor afección, en el archipiélago los atunes migran junto a grandes grupos de delfines y otras especies marinas. «No hay manera de capturar diez atunes sin llevarse por delante a cien delfines», advierte.
Capital externo y beneficio nulo para Canarias
El portavoz detalla que el proyecto está impulsado por inversiones externas que no revierten en el sector primario del Archipiélago. Señala que la cuota, la inversión y las operaciones «son completamente foráneas», mientras que la flota local sufre ya importantes limitaciones de capturas. «Aquí no habría nada para los canarios, salvo el perjuicio a toda la flota artesanal y al ecosistema marino», denuncia.
Un proyecto ajeno al conocimiento del mar canario
Para Pavón, la iniciativa ha avanzado por «desconocimiento de la realidad marina del Archipiélago». Sostiene que quienes lo han promovido «no han vivido en Canarias y no entienden el daño que produciría» tanto a la economía pesquera como al equilibrio ambiental. Por ello, celebra el apoyo de administraciones locales, insulares y regionales, que también han expresado su rechazo.
Riesgo para la continuidad de la pesca artesanal
El portavoz recuerda que el sector depende del paso natural de los atunes por las Islas para sostener su actividad, ya limitada por cuotas reducidas y muy por debajo de las necesidades. En ese contexto, que actores externos capturen y engorden atunes frente a las costas del Archipiélago supondría, a su juicio, «competencia desleal» y una amenaza directa sobre la viabilidad de la flota artesanal.
Exigencia de retirada inmediata
Pavón insiste en que las cofradías canarias exigen la retirada del proyecto piloto antes de que avance en la Unión Europea. Advierte de que su aprobación podría desencadenar un conflicto social y ambiental de gran magnitud en el Archipiélago. «No podemos permitir una actividad industrial que arrasa con nuestro recurso, con nuestra forma de vida y con especies protegidas», concluye.