Su coordinador Sergio Matos destaca que la acción psicosocial será "fundamental" durante los próximos meses y años.
La oficina de atención a los afectados por el volcán de La Palma contará con una plantilla de unos cincuenta trabajadores, según señala uno de sus coordinadores, Sergio Matos.
Matos indica que esa plantilla se nutrirá de trabajadores sociales, psicólogos y miembros de distintas empresas públicas que, sin embargo, no estarán de forma permanente en las instalaciones de la oficina en La Palma, sino que itinerarán “donde sea necesario para atender a las personas”.
Los aspectos psicosociales
Afirma que, por el momento, están gestionando la búsqueda de unas 300 viviendas provisionales para atender a las personas que han perdido su hogar, aunque matiza que el volcán continúa destruyendo casas, por lo que la cifra se podría incrementar.
Considera que no es solo necesario atender los aspectos materiales del siniestro, sino también los emocionales, “que son muy importantes”. Por ese motivo, considera que la acción psicosocial “se va a tener que trabajar mucho en los próximos meses y años”. Como dato significativo, señala que las viviendas provisionales pueden ser necesarias durante algunos años.