Fernando Castro, biógrafo del artista lanzaroteño, explica las razones del secuestro de su libro “César Manrique: Teoría del paisaje”.
El catedrático, amigo de César Manrique, afirma taxativamente que la Fundación que gestiona el legado del artista se ha convertido en "una empresa, con un capital enorme". Esto no significa, en su opinión, que esté haciendo algo ilegal sino que "se han decantado por determinadas opciones políticas, son un poder fáctico, no un contrapoder, que es lo que debería ser".
Confía plenamente que la retirada de su libro tengo un final feliz y vuelve a las librerías pronto al tiempo que critica que la Fundación "está cargando todo el peso de César Manrique en su lado ecologista, exponiendo que el artista salta de la estética a la ética y yo creo que esta dicotomía es desproporcionada. Esta versión es la que se puede ver ahora en el CAM, en la exposición de los 100 años del nacimiento de César".
Castro asegura que se arrepiente de no haber dimitido en el año 2010 "cuando ya sabía que había muchas cosas que no me gustaban de cómo se estaban haciendo las cosas en la Fundación".