La Aldea y Santa Úrsula comienzan a valorar los daños de los incendios

El alcalde de La Aldea de San Nicolás, Tomás Pérez, y el de Santa Úrsula, Juan Acosta, muestran su extrañeza por la forma en que se iniciaron los siniestros.

El alcalde del municipio grancanario de La Aldea, Tomás Pérez, reconoce que, durante el pasado fin de semana, llegó a temer "lo peor" por la magnitud de las llamas de los incendios que afectaron a la localidad, agravadas por la fuerza del viento y la presencia de la calima: "Se pasó mucho miedo". 

Señala que debido a los incendios han fallecido muchos animales, cuatro viviendas han quedado inhabitables y otras muchas han sufrido daños. Pérez señala que son muchos desperfectos y pérdidas a resarcir y considera difícil que se recupere todo lo que se perdió. Hace un reconocimiento a los equipos de extinción y señala que, respecto del pinar, el daño principal se localiza en la superficie, pero no tanto en la altura de los árboles. 

Señala que los dos incendios que afectaron al municipio comenzaron el sábado por la tarde y, aunque reconoce que no maneja datos como para saber si fueron o no intencionados, entiende que es poco frecuente que un incendio comience a esas horas.  

Todos los vecinos han perdido algo en Santa Úrsula

Por su parte, Juan Acosta, alcalde de Santa Úrsula, señala que están procediendo a la evaluación de los daños por los dos incendios que sufrió el municipio el pasado fin de semana. Señala que casi todos los vecinos han perdido algo "y la situación no es fácil". Afirma que "lo que toca" es prestar ayuda a la ciudadanía y gestionar que se reciban ayudas de otras administraciones.

Recalca que no se pueden quejar de la ayuda recibida, pues afirma que tuvieron la colaboración "en todo momento" de las administraciones y de otros municipios que colaboraron en la evacuación.

Los incendios se declararon en la mañana del sábado en dos zonas de monte y de manera simultánea: "Llama la atención que hubiera también incendios en municipios colindantes". Señala que la Guardia Civil ya los está investigando, pero reconoce que "el cóctel era perfecto" por la presencia del viento y la calima.