José Juan González Salmah: «Canarias necesita un modelo hídrico más robusto y sostenible»

José Juan González Salmah en los estudios de El Espejo Canario

José Juan González Salmah en los estudios de El Espejo Canario

➤ «La sequía en Canarias ya no es coyuntural, es estructural; necesitamos un modelo más resiliente». ➤ «No puede ser que las medianías estén sin agua mientras otros siguen despilfarrando». ➤ «El sistema de ayudas actual premia a quien más produce, incluso si pierde más de la mitad del agua».

Coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente, José Juan González Salmah lanza un mensaje de urgencia: «Esto ya no es un tema coyuntural, es estructural». El CEO de Canaragua advierte de que la crisis hídrica en Canarias requiere soluciones de largo alcance, con una gestión más eficiente, sostenible y solidaria. En la actualidad, seis de las siete islas han declarado la emergencia hídrica, lo que para González representa un punto de inflexión: «Ya no se puede posponer más el problema. Es hora de actuar».

Canaragua opera en las ocho islas y presta servicio en 37 municipios. Según González, la compañía ha logrado reducir las pérdidas en la red por debajo del 10 %, un dato que contrasta con los más del 50 % que registran algunos territorios. «Esto no se consigue de un día para otro: requiere planificación, inversión y compromiso», afirma. La clave, sostiene, está en el uso de tecnología, personal cualificado y una estrategia clara a largo plazo.

Pérdidas de agua y sistema de subvenciones: «hay que premiar al que lo hace bien»

Uno de los aspectos más polémicos es el sistema actual de subvenciones a la producción de agua desalada. González critica que no se tenga en cuenta la eficiencia de los operadores: «Produce más quien más pierde, porque así recibe más ayudas. Deberíamos premiar al que lo hace bien, penalizar al que lo hace mal y dejar neutro al que lo hace regular».

El directivo también apunta a la importancia de reducir las pérdidas no solo por responsabilidad ambiental, sino también por justicia social: «Aunque podamos pagarla, Canarias no puede permitirse desperdiciar agua. No puede ser que haya zonas de medianías sin agua por la irresponsabilidad de algunos». González insiste en que el recurso debe tratarse con el respeto que le daban generaciones anteriores: «Le hemos perdido el respeto al agua».

Turismo y eficiencia: «Es injusto culpar al sector»

En un contexto de creciente presión turística, el CEO de Canaragua defiende la gestión que hacen los operadores hoteleros: «Canarias es un referente en eficiencia hídrica en el turismo. Los hoteles han invertido y han hecho bien su trabajo». Asegura que el consumo por plaza turística es mucho menor que en otros destinos comparables y subraya que gracias a la inversión privada en desalación, la población general también se ha beneficiado del acceso al agua.

Contaminación y microplásticos: el reto invisible

Otro de los desafíos mencionados es la contaminación por plásticos, especialmente los microplásticos. Aunque en el caso del agua desalada las membranas permiten filtrarlos con eficacia, el problema se agrava en el tratamiento de aguas residuales. «Las depuradoras no están diseñadas para eliminar partículas tan pequeñas, que acaban en los lodos y, a veces, en la agricultura o en el mar», explica. González reclama mayor inversión, responsabilidad institucional y conciencia ciudadana: «Esto va de concienciación. Si todos actuamos con responsabilidad, gestionaremos mejor los residuos».

Acceso equitativo y compromiso social

González subraya que Canaragua no corta el suministro a quienes no pueden pagar: «Tenemos un programa llamado Contigo, en coordinación con los servicios sociales, que permite ayudar a más de 600 familias en situación de vulnerabilidad». Estas ayudas cubren desde el 50 % hasta el 100 % del coste del consumo básico. El objetivo es que nadie se quede sin agua por razones económicas. «La dignidad empieza por abrir el grifo y tener agua».

Nuevos perfiles y digitalización del ciclo del agua

La gestión hídrica también está experimentando un cambio tecnológico. «Ya no basta con tener fontaneros, necesitamos electromecánicos, técnicos en digitalización y monitorización remota», señala. Canaragua gestiona un centro operativo avanzado en Canarias —Dinapsis—, que monitoriza en tiempo real todas las infraestructuras hídricas del archipiélago y de otros sectores industriales, como campos de golf y grandes instalaciones. «La transición verde no solo es una exigencia ambiental, también es una oportunidad para generar empleo cualificado», afirma.

Trabajar 24/7 para que el agua siga fluyendo

Preguntado por a quién le daría un vaso de agua, González responde: «A todo el que lo necesite». Y sobre a quién no: «A nadie le negaría el agua, pero a quienes la malgastan, quizás habría que dejarles un día sin agua para que valoren lo que significa abrir un grifo y que salga». Con una plantilla diversa y cada vez más especializada, González concluye destacando el trabajo invisible del equipo humano que hace posible ese gesto cotidiano. «Detrás de cada gota hay personas que trabajan 24/7 para que el agua siga fluyendo».