Guillermo Mariscal exige responsabilidades a Red Eléctrica pero alerta de la necesidad de infraestructuras

El secretario general del Partido Popular en el Congreso de los Diputados se reunió recientemente con la empresa encargada del transporte de la energía en Canarias.

Mariscal considera que Red Eléctrica tendrá que asumir sus responsabilidades por el apagón del pasado domingo en la isla de Tenerife ya sea porque la instalación que falló era suya o porque hubo una mala ejecución. No obstante, alerta de que si queremos que no vuelva a repetirse una situación así hay que tomar medidas "que no son agradables" para la ciudadanía.

El diputado popular entiende que es necesario más tiempo para estudiar lo que exactamente ha ocurrido y que lo primero que tiene que hacer el Gobierno canario es ayudar a los afectados. Al Gobierno nacional, señala, le corresponde impulsar las redes de transporte y apoyo que hacen falta en la isla: "Los apagones sucede en zonas que no son suficientemente robustas, porque no hay suficientes infraestructuras". Apunta que el Cabildo de Tenerife no ha impulsado los proyectos para fomentar esas infraestructuras.

Denuncia que el presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, solo ha sembrado "desconcierto y descoordinación" en este asunto y se pregunta cuál es la opinión del Gobierno sobre el apagón. Señala que solo han dicho a los afectados que se pongan en contacto con la empresa: "Nos parece impresentable". Asegura que se trata de una consecuencia del "mal ejemplo" del presidente del Gobierno central,  Pedro Sánchez, y de la ministra de Transición Ecológica, "que no han dicho absolutamente nada".

Avanza que la situación en Fuerteventura es "preocupante" por las dificultades que se han puesto desde algunos ayuntamientos y Cabildo a la instalación de infraestructuras para el transporte de energía y que sobre la central de Chira-Soria, en Gran Canaria, habrá movimientos que se opongan al cableado: "Desde las administraciones hay que ser más serios".

Velocidad de crucero del PP

Mariscal señala que el ambiente nacional es "muy extraño", pues el PSOE fue a elecciones "porque pensaban que le iba a ir bien", y ahora están encontrando dificultades. Asegura que hay "una serie de vientos que hace que nuestra velocidad de crucero sea buena". No ve lejana la meta de obtener más de cien diputados.

Espera una sentencia justa en Cataluña y señala que el clima de tensión que se vivió hace dos años ha ido bajando: "Han comenzado a surgir dudas en el propio nacionalista" y cree que la situación comenzará a normalizarse en breve.