Antonio Olivera, viceconsejero de Presidencia, aboga por la necesidad de un instrumento específico que coordine la acción de todas las administraciones.
El Gobierno de Canarias está abordando “con urgencia” una solución habitacional y económica a los damnificados por la erupción del volcán de La Palma, según indica el viceconsejero de Presidencia, Antonio Olivera.
Afirma que la vivienda es una de las líneas más urgentes de trabajo, con la búsqueda de albergues y otros espacios públicos para dar una respuesta inmediata. Superado ese momento, ahora es el momento de disponer de espacios hoteleros para alojamiento temporal “y si estos no fueran suficientes, otros que están ya previstos”. Olivera afirma que, en cuestión de días o semanas, se puede solucionar la cuestión de encontrar los espacios adecuados, “porque el problema se va a prolongar”.
Indica que el Gobierno no tiene aún una previsión exacta de cuántas familias necesitarán vivienda. Cruz Roja ha estimado la necesidad de vivienda para 150 familias, pero el Gobierno canario conoce de otros casos que han acudido a recursos distintos de esta ONG, “por tanto se está trabajando en determinar cuántas familias van a requerir esos alojamientos”.
Señala que el ejecutivo ha encontrado la “total colaboración” del sector financiero para localizar las viviendas que estas puedan tener, pero ya le han adelantado que no disponían de muchas viviendas en la isla, “pero lo que tienen lo están poniendo a nuestra disposición”.
Problemas económicos y de empleo
Además del problema habitacional, el Gobierno canario está buscando también solución a los problemas económicos de los damnificados. Olivera señala que muchas empresas no van a poder continuar su actividad, por lo que es preciso articular un paquete de medidas en el ámbito del trabajo y de la seguridad social que permita paliar la situación. Asimismo, el Gobierno canario prevé que algunas familias puedan quedarse sin ingresos debido a que venían realizando actividades económicas no documentadas.
Necesidad de un instrumento de coordinación
Olivera señala la necesidad de articular un instrumento específico que coordine la acción de todas las administraciones en esta situación. Se trataría de activar un programa que va a requerir “dedicación plena para poder abordarlo”.