Miriam Barrios, portavoz de Las Kellys, y María José López, senadora de Nueva Canarias, coinciden en valorar la reunión de las camareras de piso con el presidente del Gobierno.
Barrios afirma que las representantes de las camareras de piso acudieron a la reunión "muy tranquilas" porque estaban "bien documentadas" y seguras de sus reivindicaciones. Sin embargo, quedaron sorprendidas por "romper todos los protocolos", pues una reunión prevista para cuarenta minutos se extendió más de dos horas. Asegura que en el encuentro se produjeron situaciones "divertidas", como cuando una de las camareras "se subió la camisa y le enseñó la faja que usamos las camareras de piso".
"Ahora no puede decir que no conoce nuestra problemática", afirma Barrios, que matiza que "le hemos dicho que si no conocía la situación, algo mal estarían haciendo sus ministros, diputados y senadores". Afirma que el presidente del Gobierno se mostró "abierto" a considerar la modificación del Estatuto de los Trabajadores para introducir la 'Ley Kelly', que impediría la externalización de ciertos servicios. Asimismo, se comprometió a abordar la ampliación del cuadro de enfermedades profesionales y mostró interés "por nuestros contratos, que son fraudulentos y que roban a la hucha de las pensiones".
Barrios afirma que las camareras se sienten "satisfechas" porque "en dos años hemos conseguido visibilizar una problemática escondida y vamos dando pasitos para que se tomen medidas", a pesar de los obstáculos que les han puesto los sindicatos Comisiones Obreras y UGT: "Nos siguen poniendo piedras en el camino", afirma mientras lamenta la "vergüenza de comunicado" que emitieron CCOO y UGT ayer. "Hemos destapado muchísimas carencias de los sindicatos y no nos lo perdonan". Denuncia que en ese comunicado,los sindicatos se consideran "únicos interlocutores válidos".
Las camareras de piso afirman que la lucha no acaba en la reunión con Rajoy: "no pararemos hasta conseguir cada una de nuestras reivindicaciones". A este respecto, señala que alertaron al presidente del Gobierno que "sería una vergüenza para él y su partido no cumplir con sus compromisos".
Traslado a los ministerios
La senadora de Nueva Canarias, María José López, impulsora de esta reunión gracias a una interpelación en el Senado valoró el encuentro como "positivo" e informó que anoche recibió una llamada desde La Moncloa para anunciarle que Rajoy había solicitado pasar a los distintos ministerios lo abordado en la reunión, nombrar a una persona de su entorno para coordinar este asunto y decir "que se había quedado impresionado por los testimonios".
López está particularmente sensibilizada con este problema por ser "hija de gobernanta y sobrina de camarera de piso". Afirma que esta situación "ha sido constante desde el principio" y recuerda que sus tías y su madre "cobraban 6000 pesetas al mes" al comienzo. "Ahora hemos conseguido visibilizar esta situación de crueldad laboral". Felicitó a las camareras por ser "valientes y solidarias y apoyarse unas a otras".
La senadora fue rotunda al desvincular esta reunión del apoyo de Nueva Canarias a los presupuestos generales del Estado: "La dignidad en el trabajo no puede ser moneda de cambio".