El diputado de la formación morada, Manuel Marrero, insta al Gobierno canario a actuar de mediador entre víctimas y familiares.
La ley, aprobada con el voto favorable de todos los grupos, tiene su origen en una iniciativa del grupo Podemos que se remonta a la tramitación de la Ley de Memoria Histórica, cuando se trató de incluir en esa disposición, algo que no fue posible, "por lo que comenzamos a pensar en una ley específica".
Lo que pretende la ley es que "se cupla con los principios de buscar la verdad, que haya una reparación, que se dé tutela judicial y que no vuelva a pasar". Marrero afirma que el papel de la Iglesia ha sido "fundamental" para esta actividad de venta de menores, "con ayuda e implicación de personas que estaban en instituciones civiles". Señala que la ley da respuesta a las familias de aquellos menores que fueron entregados por razones sociales e ideológicas, "y se vendieron cometiendo una ilegalidad".
Marrero confía en que el Gobierno canario sirva de mediador entre víctimas y familiares y en que a nivel nacional se apruebe una ley para que se disponga de una dotación policial y una fiscalía especializada que investigue las denuncias.