La sargento del Seprona fue la responsable de la detención de varios empresarios que cazaban pardelas en Alegranza “y, a partir de ahí, empezaron mis problemas”.
Los próximos días 22, 23 y 24 del próximo mes de octubre, la sargento del Seprona en Lanzarote, Gloria Moreno, tiene un juicio en la Audiencia Provincial de LasPalmas en el que el fiscal pide una pena de cuatro años de cárcel por emitir un informe. "Es el último ejemplo del que puedo hablar desde que empezaron los problemas de persecución contra mi persona al presentar la denuncia de una serie de empresarios que hicieron un asadero de pardelas en la isla de Alegranza".
A pesar de esta desorbitada petición del fiscal y de que se le hayan abierto ocho expedientes disciplinarios "por hacer mi trabajo", Moreno asegura creer en la justicia y en que "mi obligación es respetar y hacer respetar las leyes". La todavía sargento del Seprona, actualmente de baja, por no sentirse segura al realizar su trabajo "porque no cuento con el respaldo de mis jefes, si de mis compañeros en el Cuerpo", no ocultó que ha tenido mucha presión y mucho estrés y que eso le ha llevado a planteamientos autodestructivos "que no voy a llevar a cabo sobre todo porque no les quiero dar esa satisfacción a mis acosadores".
La militar tiene una red de apoyo en las redes sociales de 140.000 firmas y está preparando una querella contra sus mandos después de haber obtenido una setencia favorable que los condena a ellos "por acusarme en falso de una serie de actos en un Consejo Insular de Caza. No me voy a rendir y confío en ganar porque la injusticia que se está cometiendo conmigo es muy dura"