El presidente de la junta de personal del Consorcio denuncia incumplimiento de leyes por parte del Cabildo pero asegura que los bomberos seguirán atendiendo emergencias rutinarias.
José María Monzón, portavoz y presidente de los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, lamenta que no puedan presentar una querella nominal a todas aquellas personas que han incumplido leyes fundamentales para que ellos puedan cumplir con su trabajo. Han incumplido leyes en varias áreas y no solo quienes gobiernan ahora, sino también quienes lo hicieron años atrás, señala Monzón, que llega a apuntar que serían entre ocho y diez cargos del más alto nivel.
Aunque en los quince años que lleva él en el Consorcio, desde la primera promoción de bomberos, siempre ha habido desorganización, nunca antes se había llegado a esta “situación de dramatismo”. Monzón subraya que los 189 bomberos operativos a los que representa no piden nada económico sino buena gestión, asunción de responsabilidades y la adaptación a la ley 4015.
Si bien admite que hoy por hoy no pueden afrontar un peligro real porque carecen de los recursos adecuados, se compromete a que seguirán atendiendo emergencias rutinarias porque es su obligación como funcionarios. Interrogado sobre la posibilidad de privatización del Consorcio, abierta desde el Cabildo, José María Monzón habla de “ignorancia política”, destaca lo “desesperados e incómodos” que están los responsables públicos y confiesa que han llegado a acusarlos de propiciar esta situación porque se acercan las elecciones.