Gabriel González, concejal de Podemos, señala que, si lo declaran culpable, tendrá que dimitir.
El alcalde del municipio turístico de Adeje, en Tenerife, José Miguel Rodríguez Fraga, y algunos de sus concejales del grupo de gobierno tedndrán que responder por un delito urbanístico respecto a la construcción de un centro de ocio, Monkey Beach Club, ante la denuncia, admitida a trámite por la fiscalía, de una asociación de vecinos de la zona y seguida y apoyada por Unidas Podenos.
Su concejal, Gabriel González, asegura que "el alcalde tendrá que dimitir si se demuestra su culpabilidad, porque no tiene sentido que argumentando y basándose en un plan de modernización y mejora, en las que tiene que existir una construcción para hacer cambios sobre ella, en este caso se pide la ampliación en dos plantas cuando todavía no estaba construido".
El concejal denunciante está convencido que esta actuación es un delito de prevaricación urbanística "en al que están enredados la administración y los intereses particulares y si se confirma por la justicia, José Miguel Rodríguez Fraga tiene que salir del Ayuntamiento".