El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria deberá abonar 15 millones a los bomberos

Bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria | Foto; Archivo

Bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria | Foto; Archivo

Pedro Gallego, portavoz de los trabajadores, señala que el Tribunal Supremo ha reconocido que realizaron 594.000 horas de exceso de jornada.

El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, dependiente del Cabildo de la isla, deberá abonar unos 15 millones de euros a los bomberos debido a las 594.000 horas trabajadas desde 2012 y que, según el Tribunal Supremo, suponen un exceso de jornada.

El portavoz de los trabajadores, Pedro Gallego, recuerda que los hechos se remontan al año 2012, cuando una disposición del Cabildo de Gran Canaria señaló que ningún empleado de la corporación podía tener una jornada inferior a las 37,5 horas semanales. Eso supuso la ampliación de la jornada laboral de los bomberos en 300 horas anuales, a las que se sumaron otras 150 horas por jornada especial.

594.000 horas extraordinarias 

Sin embargo, indica Gallego, los bomberos ya tenían una jornada laboral especial, por su disponibilidad las 24 horas del día los 365 días del año, pero el Cabildo no lo tuvo en cuenta.

Lo que ha venido a reconocer ahora el Tribunal Supremo es que los bomberos ya cumplían con la jornada laboral de 37,5 y que no se debió haber aplicado la jornada especial sin negociación. En cualquier caso, las 594.000 horas extraordinarias realizadas deben ser retribuidas.

Pólvora del rey

El representante de los trabajadores señala que en el fondo de la cuestión se encuentra la negativa del Consorcio de Emergencia a ampliar su plantilla en unos ochenta efectivos adicionales a los doscientos ya existentes. Por este motivo, la administración tendrá que pagar ahora con creces esa errónea decisión: “La administración sea del color que sea dispara con pólvora del rey, saben que no lo van a sufrir en carne propia”. 

Denuncia que, cuando ya se acumulan cuatro sentencias del Tribunal Supremo en el mismo sentido, el Consorcio de Emergencias no se ha puesto aún “manos a la obra” para revertir esta situación.