➤ «La respuesta fue inmediata y eficaz gracias a la coordinación y los medios disponibles» ➤ «Lo más importante ahora es esclarecer las causas del accidente» ➤ «Este suceso nos recuerda que la precaución en las carreteras debe ser igual que en islas más grandes»
Casimiro Curbelo, presidente del Cabildo de La Gomera, lamenta «profundamente» el trágico accidente de guagua ocurrido en la línea 3 de transporte regular por carretera, que ha tenido como consecuencia la muerte de una mujer de Barcelona y varios heridos, entre ellos su esposo y otros pasajeros trasladados a hospitales de La Gomera y Tenerife. El presidente insiste en que la actuación tras el suceso fue «impresionante» por su rapidez y eficacia, y subraya que ahora la prioridad es saber qué lo provocó.
El accidente tuvo lugar en el kilómetro 3 de la GM-2, cuando el vehículo —sin causa conocida aún— se desvió de su carril y recorrió más de cien metros de forma inestable, con una de sus ruedas encajada entre la valla y el arcén. Finalmente, el autobús se deslizó lateralmente por un talud y cayó sobre la vía inferior, donde perdió la vida una mujer y once personas resultaron heridas. El marido de la fallecida se encontraba ingresado en el Hospital Nuestra Señora de Guadalupe, junto a otros tres heridos. Uno de los afectados fue evacuado en helicóptero al Hospital de La Candelaria, donde fue intervenido, y otro también requirió cirugía.
Curbelo explica que la vía quedó habilitada esa misma noche con semáforo y un solo carril, mientras el personal del Cabildo trabajaba en la reparación urgente del tramo dañado: «Se llevó toda la valla y parte de la cimentación, por lo que hay que reforzar esa zona cuanto antes», señala.
«Dios es grande»
El presidente destaca la gravedad potencial del siniestro: «Si la guagua no hubiera parado en esa vía inferior, habría caído por un barranco de profundidad extraordinaria. Ahí hubo suerte, por la orografía y, en fin, porque Dios es grande».
Respecto a la investigación abierta, afirma que se estaba analizando si el accidente se debió a un fallo mecánico, humano o de otro tipo: «Es muy importante conocer con claridad por qué se produce el accidente. Esa es una prioridad». El Cabildo decretó dos días de luto oficial desde la noche del suceso.
Mantener el nivel de precaución
Curbelo subraya el impacto emocional que una tragedia así causa en una isla como La Gomera: «Vivimos en un territorio tranquilo, con apenas 22.000 habitantes, donde este tipo de incidentes no es habitual. Pero eso no significa que no puedan ocurrir». Por ello, insistió en la necesidad de mantener en las carreteras gomeras el mismo nivel de precaución que en islas mayores como Tenerife.
El presidente se muestra especialmente orgulloso de la respuesta institucional y ciudadana tras el accidente: «Los dos quirófanos del Hospital de Guadalupe se activaron de inmediato, los médicos actuaron al unísono, y todas las administraciones —desde los ayuntamientos hasta las fuerzas de seguridad— actuaron en perfecta cooperación. Cuando hay coordinación y medios, se salvan vidas».
Casimiro Curbelo agradece las muestras de apoyo recibidas y traslada su pésame a la familia de la víctima mortal. Añade que los hijos de la fallecida ya se habían desplazado a la isla para acompañar a su padre y realizar los trámites de autopsia. «La comunidad gomera está con ellos en este momento tan doloroso», concluye.