Juan Ramsden, coordinador general de Binter, recuerda a la corporación insular que los vuelos los determinan los acuerdos entre países.
"Nos han colocado en una diana", afirma Ramsden en referencia a las declaraciones del presidente del Cabildo, Antonio Morales, y de su vicepresidente, Carmelo Ramírez, exigiendo a la compañía aérea canaria que no viaje al Sáhara. El directivo de Binter recuerda que su empresa no ha buscado la polémica: "Estamos sorprendidos y un poquito molestos" porque "los clientes preguntan qué va a pasar". Denuncia que el Cabildo ha creado una "alarma innecesaria en un tema que no tiene la entidad que otros le han dado".
Señala que la empresa respeta "la legalidad nacional e internacional" y recuerda que Binter, como el resto de las compañías aéreas, no negocia con ningún país: "Las negociaciones las hace la Unión Europea y el Estado español. Nosotros volamos en el marco de esos acuerdos".
Afirma no tener constancia de que el Sáhara "sea independiente o no lo sea" porque no es una cuestión que le competa.
Binter ha estado volando a El Aaiún desde hace catorce años, transportando a unas 300.000 personas, a razón de unas 20.000 anuales, "muchas de las cuales son saharauis". Ramsden le recuerda al Cabildo que el destino del norte de África está servido por Binter y por Royal Air Maroc "y nos han pedido a nosotros que nos retiremos, para dejarlo en manos de Air Maroc, lo cual es sorprendente".