Ángel Hernández, presidente de la asociación de profesionales, achaca la debilidad del concejal José Eduardo Ramírez a la actitud «cuasi mafiosa» de algunas asociaciones.
Ángel Hernández, presidente de Auto Taxi, denuncia la dejadez del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria en la regulación del sector, lo que ocasiona que no se estén prestando los servicios que demanda la ciudadanía.
Un sueldo digno
Hernández señala que el principal problema del sector es la falta de profesionales, por el escaso atractivo de los salarios. Así, actualmente existe apenas un centenar de personas contratadas, porque los trabajadores no quieren trabajar en un sector en el que no se obtiene «un sueldo digno».
Afirma que lo que se necesita es que haya taxis disponibles, algo que no se puede conseguir si solo conducen los propietarios de los vehículos durante largas jornadas: «En algún momento tenemos que descansar». A su juicio, lo que se necesita es que los trabajadores se sientan atraídos por el sector y para ello se requiere rentabilidad «y no los once euros brutos de promedio a la hora, que se traducen en cinco euros netos».
Pretensiones «cuasi mafiosas»
Frente a esto, Hernández considera que el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, se ha «puesto de rodillas» ante las «cuasi mafiosas» pretensiones de algunas asociaciones del sector.
Asegura que el propio Ramírez está convencido de que las medidas adoptadas este martes no van a funcionar, porque la única solución es «regular el taxi».