Arucas identificará sus inmuebles inacabados para convertirlos en viviendas protegidas

Juan Jesús Facundo en los estudios de El Espejo Canario

Juan Jesús Facundo en los estudios de El Espejo Canario

El alcalde, Juan Jesús Facundo, señala que el municipio tiene un censo de unas quinientas demandas, «pero indudablemente hay muchas más personas en esa situación».

El Ayuntamiento de Arucas identificará los inmuebles inacabados, con y sin residentes, que tiene el municipio, así como el suelo público que pueda ponerse a disposición de la iniciativa privada para la construcción de viviendas protegidas en régimen de alquiler a precios asequibles, según indica el alcalde la localidad, Juan Jesús Facundo.

El alcalde de Arucas ha alcanzado un acuerdo de colaboración con Orion Rental Socimi, S.A. (ORION), la primera sociedad cotizada de inversión en el mercado inmobiliario (SOCIMI) dedicada a la promoción de viviendas protegidas para su alquiler asequible de larga duración.

Reserva de Inversiones de Canarias

ORION encauza la inversión del incentivo de la Reserva para Inversiones en Canarias (RIC) desde aquellos contribuyentes que carecen de proyectos propios donde invertir hacia una fórmula de inversión inmobiliaria que proporciona una clara utilidad social para las Islas: la promoción de viviendas protegidas destinadas al arrendamiento, cuando proceda esta calificación de acuerdo con lo previsto en el Decreto 27/2006, de 7 de marzo, por el que se regulan las actuaciones del Plan de Vivienda de Canarias. 

El objetivo no es otro que el de poder poner en el mercado del alquiler asequible, bajo la vigencia del vigente Plan de Vivienda de Canarias, no menos de 2.000 inmuebles en el conjunto del archipiélago. La gestión del alquiler se realizaría en colaboración con Visocan, mediante un contrato de gestión, que asumiría los costes y riesgos de la gestión con los inquilinos (morosidad y posible desocupación), mientras que ORION se responsabilizará del mantenimiento de los inmuebles. 

Colaboración público-privada

Se trata, por tanto, de un nuevo modelo de colaboración público-privada, con la singularidad que la parte privada es además colectiva y local y contribuirá a crear un parque de viviendas protegidas de gestión pública y titularidad privada, sin generar deuda ni consumir recursos públicos.