Hablamos con José Izquierdo, gerente del Hospital General de La Palma, sobre un problema que puede suponer que hasta veinte personas no abandonen el hospital.
"Es una realidad que ocurre desde hace décadas", afirma Izquierdo. Se trata de pacientes que llegan al hospital y cuando se les da el alta no abandonan la instalación sanitaria: "algunos porque no pueden, otros porque tienen problemas de toda índole, y algunos porque sus familias declinan la responsabilidad de cuidarlos". Asegura que a veces han llegado a tener hasta veinte pacientes a la espera de que abandonen el hospital, lo cual genera problemas "cuando hay picos de epidemias, porque no podemos utilizar esas camas, y también puede incidir sobre las listas de espera".
Afirma que alguna vez lo han comunicado a la fiscalía "y no se nos dio respuesta porque entendían que no había abandono". Considera que este problema debería abordarse "legalmente".
En el Hospital no se culpabiliza al paciente "ni le añadimos mayor tensión" porque muchos de los pacientes saben que han sido abandonados "y algunos lo llevan con bastante amargura". Izquierdo invita a reflexionar sobre el hecho de que no nos demos cuenta de que "algún día seremos nosotros los abandonados".