La concejal del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma abandona el partido pero se niega a entregar el acta.
Mayte Pulido califica de "insostenible" su situación en el PP porque la línea actual del presidente Asier Antona "choca contra mis principios y, por coherencia, no puedo defender un proyecto en el que no creo". Afirma que confiaba en que el congreso regional del partido cambiara las cosas, pero no fue así, motivo por el que comenzó a gestar la idea de dejar el partido, sobre todo al ver que "desde Génova se apoyaba con total descaro la candidatura de Asier Antona".
Así, el 27 de abril escribió en su muro de Facebook: "Hoy tras largo tiempo meditándolo he tomado la decisión firme e irrevocable de abandonar un partido en el que me afilié con ilusión hace casi 20 años. Me siento incapaz de seguir en un PP que no reconozco, que ha abandonado sus principios y que se ha convertido en un proyecto que ni asumo ni comparto. Con los acontecimientos de estos días me siento avergonzada y detesto las insultantes justificaciones de las mentiras. Sólo seguiré en política si se me permite aportar mis conocimientos en el ámbito sanitario que es el que conozco y en el que puedo ser útil a los ciudadanos. Quiero agradecer el cariño y apoyo que he recibido estos años de tanta gente. Yo no he cambiado y sigo estando para el que me necesite".
Pulido considera "triste" la reciente sentencia que quita la razón al candidato a la presidencia del PP, Enrique Hernández Bento, por no ser afiliado ya al partido: "Acato la sentencia, pero me parece muy triste, porque desafiliarse es un derecho y no puede usarse para decir que no puede entrar en el fondo a ver si ha habido irregularidades" en la organización del Congreso. La ex concejal del PP denuncia la "persecución" de Antona a los que no apoyaron su candidatura, incluida ella misma.
Sobre si su salida del partido tiene algo que ver con que el partido la relegara al Ayuntamiento de La Palma cuando era parlamentaria. Pulido recuerda que le pidieron que fuera a La Palma "cuando yo vivo en Tenerife". Asegura que la concejalía "no era el mejor proyecto que podía defender, porque soy médico y conozco las trincheras de la Sanidad y la alta dirección. En lo que puedo aportar es en Sanidad. Pero acepté ir al Ayuntamiento porque me lo pidió el presidente del partido".
Ahora se siente "liberada" y no entregará su acta de concejal porque "dije que acabaría el mandato en el Ayuntamiento de La Palma, y ahora con más libertad si cabe". Se abre a la posibilidad de seguir en la política parlamentaria: "Si algún partido quiere contar conmigo y me da libertad para cambiar aquello de lo que sé, volvería al mundo de la política. Ofertas siempre hay".