Jesús González, exalcalde del municipio y portavoz del Bloque Nacionalista Rural (BNR), asegura que el municipio atraviesa una «situación límite».
Agaete atraviesa una situación límite en su Policía Local. Así lo describe Jesús González, exalcalde del municipio y portavoz del Bloque Nacionalista Rural (BNR), quien detalla que, de los efectivos existentes, «opera de una forma normal y habitual uno solo», mientras otros dos agentes permanecen en segunda actividad y el resto figura de baja o en situaciones de incapacidad que, en algunos casos, podrían ser ya permanentes.
González explica que, en la práctica, «hay tres policías locales, uno de ellos con servicio normal y dos en segunda actividad», lo que deja al municipio con un único agente plenamente operativo en la calle. Sobre el número total de plazas —tradicionalmente ocho— admite que no puede confirmarlo «porque como ha pasado tanto tiempo que llevan de baja, igual ya hay varios policías en incapacidad permanente». Concede que se trata de «un problema complejo» que no es exclusivo de Agaete y que otros ayuntamientos canarios atraviesan conflictos similares con sus policías locales.
El conflicto por las horas extra en fiestas
El exalcalde recuerda que, en el marco de las fiestas del Risco, la negativa de la Policía Local a realizar servicios extraordinarios agravó la falta de efectivos. «La policía local se declaraba en conflicto colectivo e iban a acudir a su trabajo de manera regular, pero lo que no iban a acudir era a servicios extraordinarios», afirma, aludiendo a un desacuerdo sindical por el cumplimiento de un supuesto acuerdo previo con el ayuntamiento.
Refuerzos en camino, pero con plazo
Pese al cuadro actual, el exalcalde aporta un dato para la esperanza: durante su mandato, y «a través del convenio de la FECAM con el Gobierno de Canarias», se convocaron tres plazas de policía. «Aprovecho para felicitar a los agentes que han aprobado, dos mujeres y un hombre, que se incorporarán a la plantilla de Agaete seguramente marzo-abril», indica. Ese horizonte de incorporación —tras su paso por la academia— podría aliviar la situación del cuerpo en unos meses.
González insiste en que la precariedad de medios y los desencuentros laborales en las policías locales «no es algo exclusivo que se señala en un municipio» y que, en muchos casos, los ayuntamientos optan por «resolver» internamente para evitar que trascienda. En Agaete, sin embargo, la concatenación de bajas, conflictos y procedimientos ha desembocado en un servicio esencial sostenido por un único agente operativo «de forma normal y habitual», con impacto evidente en la seguridad ciudadana y en la organización de eventos.
El municipio aguarda la resolución judicial de las denuncias cruzadas y la normalización de su plantilla, mientras el Ayuntamiento —según el relato del exregidor— mantiene la personación en los procedimientos y la tramitación administrativa ya iniciada. En paralelo, el previsible relevo generacional en el cuerpo —vía nuevas incorporaciones— abre una ventana para recomponer turnos, reforzar la presencia en la calle y recuperar capacidad operativa en dispositivos extraordinarios. «Es un problema complejo», resume, que exige certezas jurídicas, gestión de personal y acuerdos laborales estables para devolver a la Policía Local de Agaete la mínima musculatura requerida por el municipio.
El cese del jefe accidental tras conocerse una condena
Interpelado por la situación del agente Antonio Aníbal Alamón —que había ejercido la jefatura accidental y «había sido condenado por acoso en el ámbito familiar»—, González sostiene que su gobierno actuó en cuanto el caso trascendió a los medios en mayo de 2024: «Ese mismo día se quita de jefe, se abre el expediente informativo». Precisa que ordenó la incoación de un expediente para verificar oficialmente la información judicial y que «la ley marca lo que se debe hacer», trámite que —subraya— se canalizó a través de Personal y Secretaría. Añade que en su etapa «los juzgados nunca remitieron nada al ayuntamiento» y que en la propia sentencia «no aparece el Ayuntamiento de Agaete como parte a notificar».
Sobre el histórico jefe de la Policía Local, Gustavo Suárez, el portavoz del BNR relata que «se pone de baja casi a finales de agosto de 2023» por una intervención de rodilla y le comunica su intención de jubilarse. Ese contexto —precisa— llevó a que Alamón ejerciera la jefatura accidental hasta su cese administrativo tras la difusión pública de la condena.
González también se refiere a la denuncia presentada por cuatro agentes contra el subinspector por presunta sustracción de material municipal —mobiliario, esculturas y otros bienes— que habría acabado en su domicilio. «Yo lo desconozco porque, precisamente, ni he ido a la vivienda», aclara, pero confirma que, cuando la denuncia se puso en conocimiento del Ayuntamiento, «estamos obligados a personarnos para que se investigue» en defensa de los intereses municipales. «Respeto absoluto tanto a la presunción de inocencia como al procedimiento judicial», remarca, puntualizando que los hechos denunciados «son procedimientos atrás en el tiempo», anteriores a su llegada al gobierno (junio de 2023).