El alcalde de Arucas afirma que el municipio «no se queda quieto» y que las obras en marcha buscan mejorar la movilidad sin paralizar la vida económica del casco.
El alcalde de Arucas, Juan Jesús Facundo, afirma que el municipio «no se queda quieto» y que las obras en marcha buscan mejorar la movilidad sin paralizar la vida económica del casco. Reconoce que las intervenciones generan molestias, pero defiende que la inversión pública «debe estar» cuando la economía se mueve. «Voy a seguir peleando por traer financiación a Arucas», dice, insistiendo en que el objetivo es compatibilizar obras y comercio local.
Más aparcamientos y gratuidad
Facundo sostiene que hoy existen «cinco espacios importantes» de estacionamiento —además de las plazas en zona azul y una parte en zona verde para favorecer la rotación— que «superan con creces lo que era el recinto ferial». Subraya que «las plazas habilitadas son gratuitas» y que el viejo recinto, donde «cabían exactamente unos 290 coches, incluida la guagua de Global», no desaparece, sino que entra «en una obra importante». «Hemos generado más plazas, el doble incluso, y eso es demostrable», afirma.
Calendario de obras y plazos
El regidor detalla que la obra del recinto ferial comenzó a mediados de septiembre de 2025, con un horizonte de ejecución hasta el 31 de diciembre de 2026. En paralelo, «la obra del subterráneo acabará en marzo de 2026». Añade dos hitos inmediatos: «a finales de octubre» quedará restituido el cruce afectado por el soterramiento y «en noviembre» entrará en funcionamiento la rotonda de acceso a Visvique, lo que «va a agilizar» la circulación.
Reunión con los comerciantes y medidas de apoyo
Facundo explica que el Ayuntamiento se ha reunido con la asociación Comercio de Arucas y con el sector empresarial para articular «acciones como hicimos en la pandemia». Recuerda que el plan de reactivación «sigue vigente» y avanza un paquete de dinamización para la campaña navideña con «una semana blanca del comercio» y programas de «bonos de consumo». «Entiendo y empatizamos», dice, pero insiste en que el consistorio «no se ha quedado quieto».
Movilidad y circunvalación
Preguntado por la afección de las obras de circunvalación, el alcalde admite que existe impacto «no solo para nosotros, para los que vienen de otros municipios», pero rebate los mensajes catastrofistas: «Dudo que alguien vaya a Teror a pagar en un aparcamiento […] y no se quede en Arucas con un aparcamiento gratuito». Reitera que «opciones hay», aunque recuerda la necesidad de fomentar la rotación, ya que a primera hora muchas plazas las ocupan trabajadores.
Nuevas bolsas de estacionamiento
El alcalde enumera mejoras «en cinco espacios diferentes» y menciona, entre otras, la habilitación de más de «100 plazas» en el acceso a La Calva, donde los vecinos reclaman que se ejecute el viario para permitir la entrada de ambulancias. Mientras madura el proyecto y su financiación, el consistorio «pone ese espacio en uso» para favorecer la movilidad a pie hacia el centro.
Comunicación y señalización
Facundo admite que «hay que mejorar la comunicación para que llegue a todo el mundo» —también a quienes visitan Arucas desde otros municipios— y que las zonas habilitadas «necesitan una especie de mejora» en su acondicionamiento y señalética. «Es verdad que la obra interrumpe un poco la circulación», afirma, pero insiste en que el ritmo es el previsto y que los plazos permitirán normalizar los flujos de paso en el corto plazo.
Dinamización cultural y de eventos
El alcalde pone como ejemplo de atracción de público «el festival de la cerveza», con «afluencia de gente» el último fin de semana, y vincula esas actividades a la estrategia de apoyo al comercio. «No se trata de incitar al alcohol, sino de dinamizar», subraya, en línea con la agenda cultural que llena de actividad el casco histórico y sus espacios patrimoniales. «Arucas se puede venir», resume.
Mensaje a los críticos
Frente a quienes dibujan «un desastre» o «un caos», Facundo responde que «el que habla mal de su propio municipio, pues sabrá cómo le irá a su negocio». Reitera que «las opciones» de estacionamiento existen y que el proceso de obras «va a buen ritmo». «El progreso tiene sus cautividades», concede, pero pide paciencia y «tranquilidad y certeza» a vecinos y visitantes: «Seguiremos con ese compromiso».