Yeray Alvarado, abogado de los denunciantes, teme que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria vuelva a conceder la licencia.
Los vecinos del barrio de Schamann, denunciantes de las obras de la empresa Realia en el Canódromo, pedirán a la justicia que ejecute la reciente sentencia que declara caducada la licencia y paralice las obras.
El abogado de los vecinos, Yeray Alvarado, señala que el anuncio del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria de no recurrir la sentencia es "lógica" y en defensa del interés general pues con ello evita tener que indemnizar a Realia por el retraso de tantos años de la obra. No obstante, entiende que la posición municipal es "parcial" pues parte de la, a su juicio, equivocada premisa de que Realia va a actuar de buena fe y va a paralizar las obras: "Eso no es esperable porque Realia tratará de patrimonializar derechos que reclamar al Ayuntamiento".
El día de la marmota
Según Alvarado, el Ayuntamiento parece posicionarse a favor de conceder una nueva licencia según el plan urbanístico del año 2012, que, en opinión del letrado, asume la ilegalidad del plan del año 2000, cuya nulidad ya ha sido declarada: "Por tanto es nulo por el mismo motivo". Avisa que si el Ayuntamiento le concede la licencia los vecinos volverán a los tribunales. Considera que se trata de "un poco el día de la marmota", pues los aspirantes a la alcaldía suelen decir que lo van a solucionar "y después se ponen de perfil", como, a su juicio, le sucede al actual concejal de Urbanismo, Javier Doreste.