Para José María Mañaricúa, presidente de la FEHT, el verano podrá salvarse en parte gracias al cliente local y nacional tras la reapertura del sector hotelero.
Desde la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de la provincia de Las Palmas opinan que una cosa bien distinta es que se haya decidido abrir las fronteras y otra es que los turistas nacionales o internacionales decidan hacer sus vacaciones fuera de sus países por lo que –“entendemos que la demanda durante este verano será baja, que no vamos a estar en cifras del pasado año”, según destaca José María Mañaricúa, presidente de la FEHT.
La limitación del archipiélago con respecto al territorio continental es bastante si tenemos en cuenta que más del 90% del turismo que llega al archipiélago lo hace a través de los aeropuertos.
En la actualidad la FEHT mantiene contacto permanente con los turoperadores por lo que disponen de datos reales sobre las reservas –“hasta hace muy poco para este verano eran más las cancelaciones que la entrada de personas. Además, aunque en el sistema disponemos de reservas de hace cuatro o cinco meses, estamos ante la incertidumbre sobre qué porcentaje de las mismas se van cumplir o no se van a cancelar”, según Mañaricúa.
De lo que sí están seguros en la FEHT es que –“lo positivo de la apertura de las vacaciones a partir de julio es que poco a poco se irán dando los mimbres para reflejar de cara al invierno, en temporada alta, la mejora de los números siendo el mejor destino sobre todo de sol y playa en esa temporada”, añade el presidente de la FEHT.